La Agencia Nacional de Telecomunicaciones (ANATEL), dispuso a las empresas la prohibición de cobrar por la oferta de paquetes de servicios o ‘combos’ un precio menor al fijado por lo ofrecido para cada servicio de manera individual, según difundió en un comunicado. Es decir, que el servicio de banda ancha debería costar lo mismo por dentro y fuera del paquete. Excepto que se ofrezcan en promociones y se indique que es por tiempo limitado. Las compañías fueron notificadas en mayo y el incumplimiento de la regulación podría generar multas de 1,5 millones de dólares.
La oferta de servicios en paquetes permite a las empresas ofrecer varios servicios juntos a un menor precio dado que los costos de instalación se reducen al disponer los servicios de una sola vez. Aunque el regulador aclara que las medidas “no tienen la intención de restringir la libertad de precios”, las reglas impuestas tenderán a modificar los precios que colocan los operadores. La norma entró en vigencia para Telefónica que fue la única en no apelar a la Justicia. Brasil Telecom, Companhia de Telecomunicações do Brasil Central, Global Village Telecom e Telemar Norte Leste, tendrían que seguir la definición que tome el tribunal de justicia.
La ANATEL asegura que ha comprobado que la oferta de banda ancha fuera de los paquetes de servicios tiene un precio muy elevado. Esto funcionaría como un mecanismo de negación del suministro del servicio por separado u obligando al consumidor a la contratación del paquete. El regulador señala que esto es contrario a la Ley General de Telecomunicaciones (LGT) y el Código de Defensa del Consumidor (CDC), por lo tanto, ha ordenado poner fin “a prácticas que cobren precios excesivos en la contratación de banda ancha en comparación con la oferta de otros servicios de telecomunicaciones, lo que puede obligar a la compra de paquetes de servicios”. Además agregó que el análisis de la oferta de los servicios por separado permite llegar a la conclusión de la existencia de ‘subsidios cruzados’ lo cual también está prohibido por la regulación vigente.
“Este tipo de práctica de las prestadoras es común y la diferencia de precio es tan grande que representa una carga excesiva para el cliente, que es casi obligado a optar por el paquete”, dice a Guilherme Varella, abogado de Defensa del Consumidor (IDEC) a Estadao.com.br. Además explica que “esto es muy importante en un escenario en el cual sólo el tres por ciento de las personas que integran las clases D y E tienen acceso al servicio por causa de los precios demasiado elevados”.
Converge Comunicações a través de su medio digital Teletime indica que tuvo acceso al informe del regulador donde se detalla que en algunos casos la línea de teléfono fijo se ofrecía bonificada si se contrataba dentro del paquete, lo que servía para explicar el bajo precio del conjunto de servicios. Analizan entonces, que el precio de la banda ancha “sería para pagar los otros servicios del paquete” infringiendo así la LGT. Señalan que esto demuestra “la necesidad de un mayor control sobre los precios reales de los servicios” porque no hay un modelo de costos para orientar el gasto concreto del sector ya que la ANATEL se ha guiado por los precios de mercado.
