Acuerdo por ENTEL: pagarán el 10% de lo que ETI demandó ante La Haya

El conflicto por la compra y nacionalización del operador boliviano Empresa Nacional de Telecomunicaciones (ENTEL) parece haber llegado a su fin después de varios años de litigio, declaraciones y contra declaraciones de todos los jugadores implicados, especialmente el gobierno boliviano y Euro Telecom International, subsidiaria de Telecom Italia, y anterior dueña de ENTEL. Justamente ambos han decidido finiquitar el asunto con un acuerdo que “aparentemente” satisface a ambas partes.

El Ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Walter Delgadillo, anunció que el Gobierno llegó a un acuerdo el viernes pasado con ETI por la compra-venta de ENTEL. El Estado boliviano y ETI firmaron en La Paz el “Contrato Transaccional de Reconocimiento de Derechos y Liberación General y Recíproca de Obligaciones” por el cual se pagará a la empresa multinacional 100 millones de dólares por la compra de ENTEL. La cifra es el diez por ciento de los 1.000 millones de dólares por los ETI demandó al país ante la Corte de Justicia de La Haya. El acuerdo también deja sin efecto todas las demandas realizadas por ETI y su derecho a continuar reclamando. Analistas especializados indicaron que el precio de ENTEL alcanzaría los 250 millones de dólares.

Los 100 millones de dólares se pagaron en efectivo y de la caja de ENTEL el mismo viernes en que se firmó el acuerdo.  “Este es un excelente negocio para el Estado boliviano porque de los 100 millones de dólares no le cuestan un sólo centavo al Tesoro General de la Nación. Son ganancias de ENTEL, que a esta altura ya ganó 180 millones de dólares desde el año de la nacionalización”, afirmó Delgadillo. El promedio anual de utilidades netas de ENTEL rondarían cerca de los 60 millones de dólares superando en 20 millones a las utilidades que obtenía ETI.

El acuerdo con ETI no incluye los pasivos contingentes —deudas sociales, comerciales, multas y patentes entre otras obligaciones— previos a la compra, que alcanzaban a diciembre de 2008 109 millones de dólares. Delgadillo señaló que ese monto no significa precisamente deuda, sino que son procesos sociales, comerciales, pago de multas y juicios tributarios, entre otros, que se encuentran en litigio a la espera de una resolución del Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia. El Ministro estimó, de acuerdo a cálculos técnicos de la propia compañía, que la deuda quedará en no menos del 50 por ciento de ese monto.

“Según los entendidos en la materia, en el peor de los casos, vamos a arreglar por la mitad de lo que se debe”, dijo el Ministro durante el anuncio al detallar los montos. La deuda habría crecido un 21,8 por ciento entre 2008 y 2009 de acuerdo con un informe de auditoría de PricewaterhouseCoopers y de estimaciones de la calificadora Fitch Ratings publicadas por el periódico La Razón.

El Gobierno boliviano comenzó en 2007 las negociaciones para comprar toda o parte de la participación de ETI en ENTEL. Luego de un año de desacuerdos el Poder Ejecutivo nacionalizó todo el paquete accionario que tenía la empresa multinacional en el operador boliviano —el 51 por ciento del total— por decreto el uno de mayo de 2008. ETI controló a ENTEL durante 12 años desde su privatización en 1996. El Estado Boliviano fijó de manera unilateral el precio por la compañía de telecomunicaciones de acuerdo con una recomendación de la consultora Maulsen Private, contratada por el Gobierno boliviano para evaluación de dividendos. La consultora había establecido dos opciones para la operación: que se pague a ETI 214 millones de dólares por costos de dividendos más pasivos contingentes o que el Estado asuma las deudas y pague 104 millones por justo precio de la nacionalización.

ETI llevó su reclamo contra la operación al Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial, y posteriormente abrió una instancia de negociación ante las Naciones Unidas en el Tribunal Internacional de La Haya. En este último se había establecido una cifra de 433 millones de dólares en concepto del precio de ENTEL más deudas contingentes. Aunque ETI, con el asesoramiento del estudio de abogados Cleary Gottlieb Steen & Hamilton, reclamaba al Tribunal de las Naciones Unidas una compensación de 1.000 millones de dólares más un interés compuesto del 10 por ciento por la demora de la resolución de la operación más honorarios y gastos del arbitraje. Ninguna de las instancias abiertas por ETI llegó a una sentencia. El Gobierno boliviano no reconoció a ninguna de las dos instancias por considerar que sólo favorecía a las empresas y además replicó que la empresa multinacional no había invertido los 610 millones de dólares comprometidos al momento de comprar las acciones del operador.

El Ministro Delgadillo explicó que el resultado de la operación surge de un conjunto de estrategias basadas en la firme decisión del Estado en no reconocer a ninguna instancia internacional de negociación porque por más que hubiese sanciones, las mismas no serían aplicadas. “Nosotros les dijimos [a ETI]: nosotros resolvemos con las leyes bolivianas, en una justa compensación, Y si siguen el arbitraje, nosotros no les vamos a pagar nunca. ETI ha tenido que calcular que le pasaba el tiempo. Sumando y restando es una justa compensación, racional a todo lo que ha hecho en el país, a lo que ha invertido, ganado, perdido y las deudas que ha dejado. Creo que ha calculado bien porque es algo que le conviene a ellos y al país también”, dijo el Ministro concluyendo el anuncio.

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