El operador anunció que comenzó con los trabajos para extender su red de fibra óptica en la región de Magallanes, al sur de Chile. Estiman que las obras beneficiarán a 30.000 hogares. Según publicaron medios locales, el proyecto se concretará en un año y está dividido en tres etapas: la primera comprenderá el despliegue urbano, mientras que en la segunda parte se gestionará el trazado desde el límite de las ciudades hasta el límite marítimo. Finalmente, en la tercera etapa se concretará la fibra óptica submarina que permitirá unir el territorio continental con el insular.
“Es un proyecto que va a mejorar sustancialmente los servicios de telecomunicaciones de la región, permitiéndonos entregar un mejor servicio soportado por una excelente tecnología”, indicó el Director de Ingeniera y operaciones de Claro, Francisco Sabioncello.
A través de esta inversión de 20 millones de dólares, Claro podrá prestar telefonía fija y móvil, internet de alta velocidad, televisión digital de alta definición y banda ancha móvil.
Claro firmó un acuerdo con Alcatel-Lucent para el trazado de los cables de fibra óptica que atravesarán el Estrecho de Magallanes, para llegar a Tierra del Fuego, en el sur argentino. De esta manera está previsto que se de conectividad al lado argentino a fines del 2012.
