Así lo afirman las proyecciones de la consultora ABI Research que asegura que para finales de este año los ingresos serán de 5.000 millones de dólares. Lo más interesante es que muchos de los ingresos no provienen de la compra de los juegos, sino de bienes y servicios que los jugadores consumen durante el juego para ganar partidas o estatus. Para 2016, este tipo de compras supondrán la mitad de los ingresos totales generados por los juegos móviles, cerca de 8.000 millones de dólares.