“Nos encontramos en un punto de inflexión donde la Banda Ancha Móvil superó a la Fija siendo ya el modo principal por el cual los latinoamericanos se conectan a internet y es necesario tenerla en cuenta como factor fundamental en las políticas públicas para masificar el acceso a la red”, aseguró ayer Sebastián Cabello, Director de GSMA Latinoamérica, al inaugurar la Reunión Plenaria 36 de la organización que se lleva a cabo en Sonsonate, El Salvador.
En presencia de más de 130 ejecutivos incluyendo representantes de más de 30 operadoras nacionales de la región, reguladores y proveedores de la industria de telecomunicaciones móviles, Cabello destacó la importancia de la armonización del espectro y la facilitación para el despliegue de infraestructura para estimular la adopción y la universalización de Internet Móvil en todo el continente.
“Sin acceso a nuevo espectro, será muy difícil para los operadores satisfacer la demanda por servicios de Banda Ancha Móvil. Estamos hablando de un tsunami de tráfico que habrá que enfrentar: para 2014 será 13 veces más del que tenemos hoy y es un desafío para operadores y reguladores poder satisfacer las necesidades de los usuarios”, completó Cabello.
A su vez, estuvo presente el representante de la Oficina de Radiocomunicaciones de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), Jorge Ciccorossi, quien destacó: “La Banda Ancha Móvil cumple un rol clave para el desarrollo socio-económico de la región así que es necesario mejorar la eficiencia espectral e identificar mayor espectro para poder soportar esa alta demanda de tráfico de datos”.
Durante la Reunión Plenaria, el Director de Seguridad de GSMA, James Moran, presentó las “Soluciones de la Industria para el robo de terminales”, un problema social y de crimen considerado cada vez más alarmante en la región. “El robo de celulares ha aumentado significativamente en los últimos años y los teléfonos móviles son más atractivos para los delincuentes. Cada celular robado causa sufrimiento, posible violencia y consecuencias psicológicas”, describió el experto de la Asociación.
En ese sentido, Moran sugirió que la industria móvil y los gobiernos trabajen de forma conjunta para introducir medidas de prevención efectivas con la GSMA dispuesta a asistir y apoyar un programa coordinado país por país:
- Legislación local para prohibir específicamente el cambio de IMEIs y la importación de dispositivos falsos.
- Aumento de medidas de seguridad contra ladrones, traficantes y distribuidores de dispositivos robados.
- Mejorar los niveles de seguridad en terminales para proporcionar un IMEI más robusto que es menos vulnerable al cambio.
- El despliegue de bases de datos (EIR) por parte de los operadores para añadir a la lista negra los teléfonos robados en las redes locales.
- Acuerdos entre operadoras para compartir la información de la lista negra de dispositivos robados a través de las redes.
En la primer jornada de la conferencia regional, también expuso el Dr. Jack Rowley, experto en temas de Salud de GSMA, quien explicó la falta de evidencia de efectos negativos en la exposición a campos electromagnéticos de estaciones base de telefonía móvil: “Considerando los bajos niveles de exposición y los resultados de investigaciones recolectados hasta ahora, no hay evidencia científica convincente de que las débiles señales de radiofrecuencias y redes inalámbricas causen efectos negativos en la salud”.
