Las autoridades vienen trabajando en el proyecto de una banca móvil desde hace bastante tiempo. Fue en diciembre de 2010 cuando se presentaron de manera oficial las bases del sistema de pagos que permitiría a los usuarios bancarizados realizar operaciones financieras a través del celular.
Santiago Vásquez, funcionario del Banco Central, reveló en una entrevista con Vistazo que la inversión para implementación del sistema podría ronda los seis millones de dólares.
En tanto, César Robalino, presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador, propone una participación más activa del sector privado, donde las entidades bancarias utilicen las plataformas tecnológicas que ya funcionan actualmente para servicios como el home banking.
“Cada banco determinaría con qué operadora trabajaría y el Estado se encargaría de regular”, idealizó Robalino.
Pero la intención de las autoridades ecuatorianas es que el Banco Central sea algo más que sólo el regulador.
Esta semana, el Directorio del Central definió al dinero electrónico como un medio de pago, según difundió El Comercio. El valor del dinero electrónico queda establecido que vale exactamente lo mismo que las monedas o billetes en poder de la persona y al que no se le puede aplicar ningún descuento al momento de transarlo.