Son unos 45 millones de dólares los que Telefónica estaría obligado a pagar a Axtel, si no se elimina el efecto retroactivo del ajuste en las tarifas de interconexión que van de 2006 a2011.
Milenio adelantó que la filial del grupo español analiza presentar una demanda para el inicio de un arbitraje internacional.
Telefónica se ampara en el Acuerdo para la Promoción y Protección Recíproca de las Inversiones (APPRI), que establece que si una empresa considera que sus inversiones han sido afectadas, estará habilitada a iniciar un proceso de arbitraje que se llevará a cabo con paneles designados por ambas partes.
El presidente de Telefónica para México y Centroamérica, Francisco Gil Díaz, criticó recientemente la tarifa de interconexión fijo-móvil, que aprobó la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) para Telefónica y Axtel: “viola procesos internacionales. No utilizó contabilidad de las empresas. Es totalmente teórica”.