Héctor Guillén, ministro de Finanzas, anunció la semana pasada que Laticom constituirá el fideicomiso por 10 millones de dólares para invertir este monto en la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel), según se desprende de un artículo publicado por el periódico local El Heraldo. Los fondos mencionados hacen parte de los 50,5 millones de dólares que la firma estadounidense se comprometió a inyectar en la modernización de la red de transporte de la estatal hondureña.
En enero de 2011, Hondutel suscribió una alianza estratégica con Laticom. El acuerdo entre ambas partes contempla un esquema denominado “Construir, Operar y Transferir (BOT, Build, Operate and Transfer)”, y se estableció que la firma estadounidense invertiría un total de 50,5 millones de dólares en un plazo de 10 años.
Este fideicomiso era el primer paso para concretar el acuerdo, según lo firmado en los papeles, y se constituiría en el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), según información suministrada por Hondutel. La inversión de Laticom en las redes de transporte se esperaba para el año pasado, pero el proyecto se ha visto demorado hasta el presente. Mientras tanto, El Heraldo asegura que las autoridades de Hondutel contemplaban inyectar igual monto con fondos de sus reservas.
Vale remarcar que la alianza con Laticom está circunscripta a lo que respecta a la modernización de la red de transporte únicamente, y no se extiende directamente a otras áreas de la empresa, aunque evidentemente las mejoras en la infraestructura troncal de la empresa permitirán incrementar la oferta y calidad de sus servicios.
Pero los problemas de Hondutel no se limitan a esa área. Según refirió días atrás el gerente general, Romeo Vásquez Velásquez, la compañía precisa una inversión estimada de 500 millones de dólares. De acuerdo con el funcionario, por el momento el Estado no puede invertir una suma semejante en la empresa, y tampoco es factible obtener un préstamo de la banca. Frente a esta realidad, regresa la posibilidad de captar efectivo a través de la venta de acciones de la empresa para invertir en tecnología, pero Vásquez Velásquez negó que la compañía vaya a ser privatizada.
No queda del todo claro si podría entregarse el control del operador a una empresa privada, mediante la cesión de la mayoría de acciones y reteniendo el estado una participación minoritaria. Sin embargo, teniendo en cuenta los antecedentes de la región, la adquisición de un paquete minoritario de acciones por parte de un agente privado, sin el control de la operación, aparece como una chance remota.
Por su lado, Guillén ha comentado que el Presidente de la República, Porfirio Lobo Sosa, ha autorizado un plan de salvamento para Hondutel. El ministro sólo ha expresado que se busca “obtener 500 millones de dólares para un programa de inversión de cinco años, mediante una figura conocida como holding, en donde interviene la empresa, trabajadores y clientes”. Este plan sería discutido en la junta directiva a mediados de abril, y aunque se desconocen aún los detalles, se estima que está relacionado con los planes de capitalización comentados por Vásquez Velásquez.
Hondutel se encuentra desde hace algún tiempo en una situación delicada, acorralada por pérdidas mensuales, falta de inversión fundamentalmente en tecnología, deudas de grandes clientes del sector público y pérdidas ocasionadas por el robo de cables, entre otros problemas. Las pérdidas mensuales, ocasionadas por la falta de inversión, están estimadas en 20 millones de lempiras (un millón de dólares), según reveló Vásquez Velásquez al periódico La Tribuna en septiembre pasado. En esa misma ocasión, el directivo también mencionó que las pérdidas acumuladas ocasionadas por el robo de cables sumaban 11 millones de lempiras (580.000 dólares) en los primeros tres trimestres de 2011.
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