Los operadores de telefonía móvil de Brasil presentaron al secretario de Recursos Hídricos y Ambiente Urbano del Ministerio de Medio Ambiente, Ney Maranhão, una propuesta de Acuerdo Sectorial para la aplicación de una Política Nacional de Residuos Sólidos. La iniciativa fue presentada por el Sindicato Nacional de las Empresas de Telefonía y del Servicio Móvil Celular y Personal (SindiTelebrasil), en conjunto con la Asociación Brasileña de Industria Eléctrica y Electrónica (Abinee).
El documento prevé que en 2018, todas las ciudades con más de 80.000 habitantes tendrán urnas para la recolección de celulares y baterías en desuso en todos los comercios minoristas. Además, las empresas se comprometen a darle a los residuos electrónicos una disposición ecológicamente correcta.
El proyecto comenzará en seis meses en las ciudades de Belo Horizonte, Brasília, Cuiabá, Curitiba, Fortaleza, Manaus, Natal, Porto Alegre, Recife, Rio de Janeiro, Salvador y São Paulo. En un plazo de doce meses se extenderá al resto de capitales de Estado. En el quinto año, se espera alcanzar 366 municipios.
Las empresas de telefonía móvil de Brasil ya están trabajando en el desarrollo de programas propios de reciclaje de electrónicos. Oi, por ejemplo, firmó un acuerdo con Descarte Certo para trabajar en el tratamiento de residuos electrónicos.