Telefónica quiere ser líder de la banda ancha en un deprimido mercado europeo

Luis Miguel Gilpérez

Luis Miguel Gilpérez, Presidente de Telefónica España

El mismo día en que agentes del mercado europeo levantan la voz en señal de alarma ante la pérdida de competitividad del Viejo Continente en el mundo de las telecomunicaciones a nivel mundial, Telefónica España hace un alarde de su intención de liderar a esta deprimida región mediante la creación de una red integrada de ultra banda ancha.

No está el horno para bollos ni en Europa ni en España, ya sea a nivel macro económico o del sector de las telecomunicaciones. Si recientemente en la Península Ibérica se consideraba como noticia optimista que el mayor desempleo de su historia cayera en 31 personas en el mes de agosto, en el resto de Europa un reporte de la Asociación GSM (GSMA) alertaba, otra vez, sobre la pérdida de competitividad del sector de las telecomunicaciones.

Una visión compartida por varias personalidades del sector como Franco Bernabè, presidente y CEO de Telecom Italia, y la comisionada europea, Neelie Kroes, que participan del evento GSMA Mobile 360, que se celebra esta semana en Bruselas y donde otras personalidades de esa región ayudarán a agudizar el dramatismo de la situación europea.

Coincidiendo con su evento, la GSMA lanza un estudio que viene que ni pintado, dado los últimos movimientos de mercado, donde Microsoft compra a una devaluada Nokia, después de un plan bien elaborado de más de dos años, y Verizon expulsa a Vodafone, previo pago, del lucrativo mercado norteamericano.

El reporte “Mobile Economy Europe 2013”, desarrollado por GSMA Intelligence, concluye que el sector móvil generó el 2,1 por ciento del producto interno bruto (PIB) de la Unión Europea (UE) en 2012, lo que se traduce en 394.000 puestos de trabajo. Estos datos se sazonan con el hecho de que la UE es la única región del planeta cuyos ingresos provenientes de los servicios móviles de telecomunicaciones han decrecido de 162.000 millones de euros en 2010 a 151.000 millones en 2012; todo y contar con la tasa de penetración más elevada, un 79 por ciento.

La situación no parece ir a mejor en el despliegue de nuevas tecnologías como LTE, donde Europa, pionera en el despliegue de servicios 3G, ahora se encuentra por detrás de Estados Unidos y Corea del Sur —aquí GSMA compara continentes con países, lo que no tenemos claro que sea del todo acertado—. Para solucionarlo, la GSMA vuelve a hacer un llamado a las autoridades europeas para que creen un marco que acelere la inversión en este tipo de infraestructura, y para que implementen mecanismos que ayuden a los usuarios a confiar más en estos servicios —en el roaming, operadores y autoridades nunca estarán de acuerdo—.

Y mientras Europa se lame las heridas, Luis Miguel Gilpérez, presidente deTelefónica España, anuncia en el marco del XXVII Encuentro de Telecomunicaciones que organiza la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, que su empresa está inmersa en el despliegue de la que será “la mejor ultra-red de banda ancha integrada de Europa”. La compañía se encuentra en un camino de profunda transformación hacia el mundo digital,  que implica la simplificación de su arquitectura de red y la intensificación de los despliegues combinados de Fibra Óptica (FTTH) y de LTE.

Telefónica dice haber invertido en España en 2012 casi 1.700 millones de euros, aproximadamente el 40 por ciento de las inversiones totales del sector en ese país, siendo el despliegue de redes de nueva generación el principal destino de su inversión. En el primer semestre de 2013 habría invertido ya más de 627 millones de euros para reforzar la construcción de esa red de Ultra BroadBand (UBB) que combina FTTH y LTE. La estrategia de la compañía parece centrarse en desarrollar una red inteligente, que permita la coexistencia de las diferentes tecnologías de forma eficiente, y que cubra las crecientes necesidades de conectividad de los clientes. La cifra de inversión acumulada de Telefónica en España, dedicada especialmente al despliegue de redes de alta velocidad fija y móvil en los últimos cinco años, supera los 10.000 millones de euros, dice un comunicado de la compañía.

La transformación de la red de Telefónica para convertirse en la mejor de Europa conllevará la simplificación de una infraestructura aún muy compleja, que sigue en buena parte el modelo tradicional y en la que conviven distintas redes, con lo que se procederá a al apagado paulatino de la red de cobre para facilitar la evolución hacia nuevas tecnologías.

Telefónica está por iniciar de forma “inminente” el lanzamiento de su red LTE que contará con Alcatel-Lucent (ALU) y Ericsson como suministradores para realizar el despliegue. Ambas compañías tendrán que desplegar infraestructura en alrededor de 2.200 nodos en 2013, hasta alcanzar la cifra de 3.000 nodos en el primer trimestre de 2014. En el presente ejercicio, el objetivo es cubrir alrededor de 60 ciudades de más de 100.000 habitantes.

La banda de frecuencias en la que se desplegará inicialmente la red LTE de Telefónica en España será la de 1800 MHz, hasta que esté disponible la de 800 Mhz que quedará liberada por el dividendo digital. De esta manera, las velocidades máximas de transmisión de los datos en movilidad que este primer despliegue permitirá a los clientes de Movistar serán de hasta 75 Mbps de bajada y 25 Mbps de subida.

Los clientes de Movistar podrán acceder  a la nueva red en los próximos días, cuando se anuncie la oferta comercial 4G, con servicios de banda ancha móvil ultrarrápida en ciudades como Madrid, Barcelona, Málaga y Valencia. En octubre, los servicios 4G estarán también disponibles para los clientes de Sevilla y Alicante. Y antes de que finalice el año podrán disponer de ellos todos los usuarios en Murcia, Castellón, Zaragoza, Tarragona, Cádiz, Gerona, Córdoba, Huelva, Bilbao, y el resto de capitales de provincia de más de 100.000 habitantes.

En paralelo a la construcción de esta red propia de LTE, Telefónica firmó el pasado 1 de agosto un acuerdo con Yoigo en el que, entre otras cosas, se establecía el acceso por parte de Telefónica al servicio 4G de este operador sobre 1800 MHz. Orange, uno de los competidores de Telefónica y Yoigo, pidió a las autoridades españolas que no permitiera dicho acuerdo para compartir infraestructura

Mientras, Telefónica anuncia que acelerará el despliegue de su red de fibra óptica gracias a los recientes acuerdos alcanzados de inversión conjunta y de uso compartido de las infraestructuras en los edificios con Jazztel (Orange y Vodafone tienen un acuerdo similar), y por el incremento del 35 por ciento en las inversiones en fibra respecto al año pasado. Así, a finales de año el número de hogares en cobertura con fibra, que actualmente alcanza los 2,7 millones, llegará a los 3,8 millones. Según datos del operador, el número de hogares que ya han contratado este servicio rondaría los 431.000 a finales del primer trimestre de 2013.

Telefónica deberá correr si quiere realmente tener la mejor red integrada de banda ancha del continente, pues el resto de grandes operadores, como France Telecom (FT), Deustche Telekom (DT) o Vodafone tampoco están de brazos cruzados a pesar de la crisis. De hecho, este último operador está por obtener una importante inyección de capital por la venta de su participación en Verizon Wireless, confirmada esta semana, que puede tener un impacto positivo en su filial española.

Cuenta con más de 22 años de experiencia cubriendo el sector de las telecomunicaciones para América Latina. El Sr. Junquera ha viajado constantemente alrededor del mundo cubriendo los eventos de mayor relevancia para la industria en América, Europa y Asia. Su experiencia académica incluye un BA en periodismo escrito por la Universidad de Suffolk en Boston, MA, y un Master en Economía Internacional en la misma institución.

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