La presidenta Laura Chinchilla modificó parcialmente el Plan Nacional de Atribución de Frecuencias (PNAF) y dio por finalizada la polémica sobre el uso de la banda de 2,6 GHz para LTE. El decreto 38033-Micitt modificó la atribución del segmento de 2500 MHz a 2690 MHz, avalando su uso para servicios móviles con sistemas IMT, informó el diario costarricense El Financiero. En su versión anterior, el PNAF establecía que esa porción de espectro se utilizará para IMT y telefonía fija.
Costa Rica prevé que un total de 140 MHz de los 190 MHz que componen este segmento, —que está concesionada en su totalidad al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE)— sean licitados en 2015. El proyecto es parte de un borrador de calendario de licitaciones en análisis por parte del Viceministerio de Telecomunicaciones y la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel). En caso de aprobarse, el ICE deberá devolver al Estado el 74 por ciento de la frecuencia que posee en la banda de 2,6 GHz.
Rowland Espinoza, viceministro de Telecomunicaciones, apuntó que el decreto es parte de un proceso de actualización del PNAF en base a los lineamientos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).
ICE inició la semana pasada sus operaciones 4G sobre la banda de 2,6 GHz.