La tecnología de retransmisión a través de redes móviles utilizando la infraestructura y espectro existente vuelve a sufrir un nuevo empujón por parte del sector a pocos días del Mobile World Congress 2014 (MWC2014). Esta vez evolved Multimedia Broadcast y Multicast Service (eMBMS) tiene el aval de pruebas pre comerciales en Estados Unidos y Australia, y un lanzamiento comercial en Corea. Aún es pronto para determinar si, por fin, esta tecnología será adoptada de forma generalizada, pues lleva nueve años intentando hacerse un hueco dentro del sector. La primera estandarización de la tecnología por parte del 3GPP se produjo en 2005 para ser utilizadas en las redes WCDMA/3G, donde nunca llegó a cuajar —sus siglas eran MBMS—. ¿Por qué están más confiados sus proponentes en 2014?
La respuesta, según Peter Carson, director senior de marketing de Qualcomm, parece ser tan simple como la introducción de la tecnología LTE, cuyas capacidades potencian aún más los beneficios de MBMS —de ahí que ahora se llame eMBMS—. La versión de la tecnología para las redes 3G, MBMS, se basaba en WCDMA, mientras que eMBMS se basa en OFDM. Este simple hecho es considerado un factor diferencial importante para explicar por qué en las redes 3G MBMS no tuvo éxito entre los operadores, dice Carson.
Pero curiosamente OFDM era también la modulación de radio utilizada por el servicio FLO que ofrecía el propio Qualcomm a los operadores de Estados Unidos para su oferta de televisión móvil. FLO no funcionó a pesar de que tanto AT&T como Verizon Wireless subcontrataron los servicios de Qualcomm. No parece que en ese caso una tecnología superior fuese suficiente para garantizar el éxito del servicio —aunque el espectro utilizado para el servicio no era el del propio operador, sino activos espectrales de Qualcomm—.
En aquella época, tanto FLO TV como la venta de la solución MBMS iban encaminadas a vender prácticamente servicios de televisión en el móvil. Algo de lo que se quiere escapar en esta ocasión para evitar caer en el error de asociar a la tecnología a un único modelo de negocio y, además, fallido. Por ello Carson insiste en desasociar a eMBMS de la televisión en el móvil, poniendo ejemplos de servicios que la tecnología podría habilitar, tales como actualizaciones de los sistemas operativos de los dispositivos, servicios de alerta de emergencias, publicidad móvil, televisión en vivo y patrocinio de contenidos.
Algunos de los ejemplos mencionados están relacionados con el ahorro en el tráfico de datos —por ejemplo, la descarga de actualizaciones que no generan ingreso para el operador—, y otros se basan en modelos de negocio que los operadores aún no no ha capitalizado como esperaban, como la televisión o la publicidad móvil. Por lo tanto, si bien LTE puede ser un impulsor de la tecnología dadas sus bondades con el espectro, aún parece quedar un poco floja la parte relacionada con la monetización de la tecnología —quizá en el MWC de dentro de dos semanas aparezcan casos concretos—.
Según nos comenta Carson, serán los operadores que migren a LTE Release 10 los que primero se embarquen en el lanzamiento de este tipo de servicios. Korea Telecom es el primer operador con LTE Release 10 en lanzar el servicio de forma comercial en Corea utilizando el Samsung Galaxy Note 3 —para ofrecer el servicio además de actualizar software y firmware en las estaciones base, se debe tener el parque de terminales habilitados para recibir la señal—.
Según el ejecutivo, hay ocho pruebas en marcha con la tecnología en Estados Unidos, Europa y Asia Pacífico. En el primer mercado, Verizon Wireless no ha escondido sus cartas y con motivo de la Super Bowl del fin de semana pasado mostró lo que deberá ser su futuro servicios comercial eMBMS este mismo año.
Como toda tecnología, el ecosistema será clave para abaratar costos y ver florecer un número creciente de dispositivos que incorporen la tecnología. En este sentido, y Qualcomm lo debe saber porque provee los chips, los principales fabricantes de smartphones y tablets la estarían apoyando. También ha habido nuestras de apoyo por parte de los principales proveedores de infraestructura como Ericsson o Huawei, que han ido realizando anuncios de pruebas, algunas de ellas directamente con el propio Qualcomm.
Aún así no parece existir una solución para hacer un fall back hacia 3G para mantener el servicio activo si el usuario deja la red 4G, como sucedería con servicios como la voz sobre LTE (VoLTE), lo que indica que eMBMS podría tener en mente patrones de uso muy concretos y estacionarios como, por ejemplo, su utilización en estadios de fútbol o lugares donde haya fuertes concentraciones de usuarios intentando acceder a un mismo contenido relevante dada su ubicación —Verizon Wireless utilizó el servicio en el estadio de la Súper Bowl—.
El problema fundamental, no nos parece tecnológico sino de concepto, ¿podrán los operadores determinar que contenidos son de interés general en un momento dado de forma que estos puedan lanzarse a través de eMBMS para aliviar la posible congestión de usuarios accediendo a ese contenido en formato unicast?
eMBMS emerge nuevamente este año como una solución interesante para maximizar el uso del espectro pero donde los modelos de negocio aún no están claros, y actualmente, erróneamente o no, los operadores parecen querer invertir en soluciones que ahorren y generen a la vez. En el MWC2014 los fabricantes no perderán la oportunidad de darle un nuevo empujón aprovechando que hay varios operadores que parecen tener firmes intenciones de lanzar el servicio. Quizá esta sea la diferencia más relevante a tener en cuenta en relación a promociones de la tecnología en congresos anteriores.
