Luego de que esta semana adquiriera nuevamente notoriedad pública la opción de compra que mantiene Teléfonos de México (Telmex) sobre Dish (propiedad de MVS y Echostar), la compañía de Carlos Slim remarcó en un comunicado que “los acuerdos comerciales que tiene con Dish desde 2008 han sido siempre públicos y transparentes y han sido reportados ante las autoridades regulatorias competentes, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y la Securities and Exchange Commission (SEC), además de que han sido abordados en medios de comunicación en diferentes ocasiones”.
La notificación, circulada ayer, jueves 20 de febrero, contiene un boletín informativo originalmente divulgado en febrero de 2011 en el que la empresa explicaba que los convenios comerciales que tiene con Dish son “para prestar servicios de facturación y cobranza a través del recibo telefónico, de los servicios de televisión satelital directa al hogar de esa empresa y comercialización de sus servicios a través de nuestra red de distribución”. Además, indicaba que Telmex no participa directa o indirectamente en el capital de Dish México, aunque reconocía que en futuro podría participar en una inversión conjunta con el operador DTH si la operación fuera aprobada por las autoridades. Y señalaba que las operaciones en cuestión “han sido debidamente conocidas y autorizadas por la Comisión Federal de Competencia (Cofeco)”.
La existencia de la opción de compra también fue reconocida, apunta la telefónica, en una conferencia telefónica con analistas y medios en el primer trimestre de 2011. Según una transcripción brindada por Telmex, allí Adolfo Cerezo, director de Administración y Finanzas de la firma, señalaba que la compañía tenía una opción para adquirir el control de Dish, siempre que primero se le permitiera a Telmex proveer servicios de TV paga y que las autoridades aprobaran la adquisición.
Mientras tanto, el grupo Televisa indicó también ayer que pedirá al Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) investigar la relación entre ambos operadores, que la firma calificó como “una concentración ilegal y dañina para una auténtica competencia”.
El multimedios sostiene que la alianza entre Telmex y Dish contiene “diversas irregularidades”, y que en realidad se trata de “una sociedad de facto”, en la que Telmex participa de la toma de decisiones y de la cual “ambos concesionarios dieron información falsa e incompleta a todas las autoridades”.
Televisa asegura que el motivo de la alianza es “eliminar cualquier riesgo de competencia para Telmex en sus negocios de acceso a internet de banda ancha y telefonía fija, garantizando mantener su elevado poder sustancial en ambos servicios. Además, la maniobra busca depredar el mercado de TV de paga para eventualmente subir los precios”.
