La Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) negocia un préstamo de 200 millones de lempiras (9,52 millones de dólares) para pagar las prestaciones de los 728 empleados que suspendió en octubre de 2014 y proceder con su despido.“Ellos no podrán continuar trabajando en la empresa porque no existe capacidad financiera para pagarle sus salarios y antes bien nos estamos preparando para pagarles sus prestaciones”, aseguró Jesús Mejía, gerente general del operador estatal, según informó el diario La Tribuna.La compañía emplea en la actualidad a 3.233 personas, cifra que deberá reducir a 2.500 si desea alcanzar eventualmente un equilibrio en sus finanzas. Como consecuencia de los recortes realizados hasta ahora, el monto para el pago de salarios cada mes se redujo en 13,6 millones (647.619 dólares), de los cuales 11,8 millones (561.904 dólares) están destinados al pago de prestaciones para empleados permanentes que renunciaron voluntariamente o fueron despedidos. Los 2,1 millones (100.000 dólares) restantes van a los trabajadores con contrato.Los últimos tres gobiernos gastaron cerca de 20.000 millones de lempiras (952 millones de dólares) provenientes del operador estatal para financiar el gasto público y cumplir con diversos compromisos políticos, situación que profundizó su retraso tecnológico y produjo una de las peores crisis financieras de su historia.A pesar del prolongado trance, empresarios de Israel, Costa Rica, Uruguay, China y los Estados Unidos han mostrado interés en invertir en Hondutel.