El Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) de Nicaragua expresó su desacuerdo con buena parte del anteproyecto de Ley de Promoción y Desarrollo de la Red Nacional de Servicios de Telecomunicaciones de Banda Ancha, que impulsa el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor).
En una entrevista concedida a El Nuevo Diario, José Adán Aguerri, presidente de Cosep, dijo que la iniciativa atenta contra la inversión privada y aseguró que el regulador busca tener “el control absoluto” de Internet, además de atribuciones sobre la fijación de precios.
“Lo ideal es que ni siquiera llegue a la Asamblea Nacional, pues el internet quedaría en control del Estado, incluyendo el Internet de Claro y Telefónica”, sostuvo Aguerri. “No serían las empresas privadas las que tengan que negociar los contratos, sino una empresa estatal que manda a crear la misma ley”, agregó.
También se opuso a una cláusula que obliga a los concesionarios a “presentar toda la información técnica, económica y financiera que Telcor les solicite para fines estadísticos, de control, supervisión y fijación de tarifas”, argumentando que la defensa de los datos confidenciales es un principio fundamental de la actividad privada.
Sin embargo, admitió que, junto a miembros de la Asociación de Internet de Nicaragua (AIN), se reunirán con representantes de Telcor para llevar adelante una revisión técnica del proyecto.