¿Cuándo lanzar Voz sobre LTE en Latinoamérica?

Muchos operadores en Latinoamérica se plantean esta pregunta a diario, y es muy probable que ninguno haya encontrado una respuesta suficientemente argumentada como para conseguir la aprobación del caso de negocio.

Hace algunos años atrás —o quizás meses en algunos casos —la pregunta aún era: ¿Lanzaremos VoLTE o podremos evitarlo? Hoy no hay duda que VoLTE será desplegado en todos los operadores que pretenden seguir ofreciendo servicios de voz –así lo dispuso 3GPP.

La respuesta más apropiada a esta pregunta es: “cuando el operador esté listo”. Ahora nos toca investigar que factores determinan si un determinado operador está listo o no.

En primer lugar, es necesario desmitificar el hecho de poder justificar la inversión por nuevos ingresos generados por el servicio de VoLTE. En breve, VoLTE no ofrece ningún diferenciador notable que permita considerar nuevos ingresos que hoy el operador no tiene. VoLTE como concepto es ofrecer voz, video y mensajería utilizando la red 4G LTE, cosa que todo operador ya hace, sólo que sobre 2G y 3G. Es cierto que VoLTE ofrece algunas mejoras en términos de calidad de experiencia para el usuario, como son el bajo tiempo de establecimiento de llamadas, llamadas de voz en alta calidad (HD) –esto no es exclusivo de VoLTE– y llamadas de video, por mencionar algunas. La gran problemática para el operador sigue siendo que los abonados no estamos dispuestos a pagar más por estos supuestos “beneficios”.

En términos de red, es bastante improbable que todas las condiciones estén dadas —tal cual lo indican los estándares — para desplegar VoLTE. Pero si el operador está esperando tener sus servicios de prepago migrados a Diameter, sus servicios de red inteligente migrados a SIP y demás condiciones antes de empezar con VoLTE es probable que la decisión se demore más de lo esperado.

VoLTE implica un reingeniería profunda de la red pero no obliga a que todos esos cambios y evoluciones de los sistemas tengan que ser previos —o al mismo tiempo que — al despliegue de VoLTE. Las implementaciones comerciales de VoLTE no fueron hechas en entornos “perfectos”, sin embargo, los servicios ya lanzados han sido integrados con todas las plataformas mencionadas. VoLTE no es —ni debe ser — un silo. El requerimiento mandatorio previo a lanzar VoLTE es tener LTE —lo cual es obvio —, para el resto de los desafíos que presenta la red. La rueda ya fue inventada.

El ecosistema de dispositivos siempre es un determinante respecto a la adopción de la tecnología por parte de los operadores: si no hay teléfonos capaces de soportar VoLTE ¿para qué lanzarlo? La realidad es que VoLTE requiere cierto procesamiento extra en los dispositivos, es por eso que no todo dispositivo que soporta LTE, necesariamente soporta VoLTE.

Hoy día no existen “feature phones” que soporten VoLTE — y tampoco hay planes conocidos de ningún fabricante —. Los smartphones de alta gama como iPhone 6 o Galaxy S6 tienen soporte nativo de VoLTE pero nos referimos a terminales que pueden superar los 500 dólares. La penetración de estos dispositivos en Latinoamérica no es elevada. Aunque Samsung tiene planes agresivos para expandir su portafolio con soporte VoLTE, hoy día no hay smartphones disponibles por debajo de los 100 o 150 dólares.

¿Es esperable que aparezcan estos dispositivos pronto? Varios lanzamientos comerciales en Europa son alentadores en este sentido. Se espera que la demanda de VoLTE crezca rápidamente y esto haga que más fabricantes se animen a incorporar VoLTE en su gama baja. El diagnóstico hoy es que hay varios dispositivos disponibles en gama media y alta, pero ausentes en gama baja.

Entonces, ¿qué llevó a casi todos los operadores de Estados Unidos, Japón y Corea a lanzar VoLTE? Las razones son varias y al mismo tiempo diferentes entre operadores. En Estados Unidos, el primer operador en lanzar VoLTE en 2012 sufría de sobremanera la escasez de espectro. Al momento de desplegar LTE y siendo un operador CDMA —lo cual le impedía utilizar Circuit Switch Fallback — decidió lanzar VoLTE. Dado que quedan muy pocos operadores CDMA en el mundo, en 2012 la disponibilidad de dispositivos “dual radio” —CDMA y LTE —era casi nula, probablemente obligando a tomar esta decisión.

En Corea se da un caso particular donde se combina un mercado interno muy grande capaz de empujar la fabricación de dispositivos exclusivos; sumado a que uno de los dos mayores fabricantes es, justamente, coreano y con un consumidor promedio muy ávido de tecnología, las condiciones estuvieron dadas para que VoLTE se masifique temprano.

¿Qué hay acerca de las eficiencias operativas logradas por VoLTE? VoLTE ofrece el doble (dos veces) de eficiencia espectral que 3G (UMTS). Esto puede ser un catalizador de la decisión para lanzar VoLTE si el mayor problema del operador es la saturación de su espectro. Por otro lado, la idea de hacer “refarming” de frecuencias de 2G y 3G a LTE contribuye a la decisión de VoLTE.

En conclusión, el lanzamiento de VoLTE en Latinoamérica está fuertemente atado a la evolución de las redes existentes —motivado por una reducción del TCO ofrecido por los fabricantes de equipos —, la disponibilidad de dispositivos de gama media-baja y la escasez de espectro para servir a los usuarios. ¿2015, 2016 o 2017? No sería descabellado encontrar las primeras redes comerciales —o con “friendly traffic” — antes del final de 2015. Sin embargo, se espera que sea 2016 el año donde VoLTE prolifere.

¿Y mientras tanto? Pavimentar el terreno: estudio de la tecnología y su impacto —especialmente en lo que ya existe ¿qué impacto tiene VoLTE en la eUTRAN? —, planes de evolución de red, entrenamiento de los equipos de operación y mantenimiento, marketing, entro otros.

No hay que desesperarse, pues es un hecho que todos los operadores móviles desplegarán VoLTE.

Pablo Strika es Director de Ventas para Latinoamérica de Mitel (Mavenir Systems Unit). Sus responsabilidades incluyen liderar los esfuerzos de ventas así com la gestión de las cuentas clave en la región referentes a VoLTE, RCS, Mensajería Convergente y aplicaciones IMS. Antes de trabajar para Mavenir en 2013, Pablo era Director de las Principales Cuentas Globales de Aricent Group, enfocado a posicionar los servicios y soluciones OSS/BSS de la compañía. Anteriormente, Pablo estuvo nueve años en Alcatel Lucent en Buenos Aires, Argentina, donde desempeñaba funciones de gerente técnico de proyectos en VoIP, accesos fijos, banda ancha fija, IP/MPLS y transporte óptico. Más tarde en Alcatel-Lucent fue promovido a Director de ventas de Servicios y se trasladó a la oficina de Miami, Estados Unidos. Pablo cuenta con una carrera de Ingeniería Electrónica y un Master en Tecnología Médica por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires. Además cuenta con un Master de Administración de Empresas de la Universidad del CEMA.

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