El proyecto legislativo que obliga a los proveedores de servicios de Internet a fijar una velocidad mínima garantizada de acceso fue enviado a la Cámara Baja tras recibir el aval del Senado chileno.
La iniciativa modifica la Ley General de Telecomunicaciones y propone implementar un sistema de evaluación permanente que posibilite a los usuarios saber cuál es el nivel de cumplimiento de los operadores.
La norma en estudio también exige que los operadores cuenten con una concesión otorgada por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) y que las mediciones sean realizadas por un organismo técnico independiente designado mediante licitación pública, entre otras disposiciones.
El regulador, sin embargo, mantendrá la potestad de realizar sus propias mediciones.