Las redes Wi-Fi transportarán casi el 60 por ciento del tráfico de datos generado por teléfonos inteligentes y tabletas para 2019, reveló un estudio realizado por Juniper Research.
De acuerdo al documento, el volumen de tráfico alcanzará entonces los 115.000 petabytes, cifra que casi cuadruplica los 30.000 petabytes de datos previstos para el año en curso.
La investigación destaca también el potencial del offload para enfrentar la cobertura irregular, crear nuevos productos y aumentar el uso de los servicios 3G y 4G existentes.
Sin embargo, advierte que trae desafíos en materia de despliegue y retorno de inversión (ROI). “Los operadores necesitan implementar áreas Wi-Fi propias en zonas problemáticas o asociarse a operadores de hotspots Wi-Fi y agregadores”, dijo Nitin Bhas, autor del estudio.
Otro reto son los hotspots comunitarios conformados por conexiones residenciales. El proveedor iPass calculó que existían 40 millones al cierre de 2014, cifra que se elevaría a 90 millones este año.