La novela de Claro y ETB sumó otro capítulo: una nueva notificación del Consejo de Estado de Colombia reinició el juego de interpretaciones jurídicas contrapuestas que ha caracterizado el conflicto entre ambos operadores.
El cuatro de septiembre pasado, ETB informó que el organismo había confirmado las medidas cautelares de embargo y secuestro dispuestas por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca contra la filial de América Móvil.
Asimismo, dijo que el Consejo aceptaba que Claro debía constituir una caución de 300.000 millones de pesos colombianos (95,9 millones de dólares) a favor de la bogotana a causa del conflicto de interconexión que aún los enfrenta.
Por su parte, voceros de Claro negaron al periódico La República que la entidad se haya pronunciado respecto a la decisión del juzgado cundinamarqués y la caución, asegurando que no existe aún una determinación final sobre el tema.
Tan solo la semana pasada, un tribunal de arbitramento exoneró a ETB del pago de una deuda de 220.000 millones de pesos colombianos (70 millones de dólares) reclamada por Claro en una causa separada.