La Agencia Nacional de Telecomunicaciones de Brasil (Anatel) presentó un nuevo paquete de medidas destinadas a reforzar el combate contra los robos y hurtos de teléfonos móviles en todo el país.
Las personas ahora pueden solicitar el bloqueo de los celulares extraviados o robados a sus respectivos operadores informando simplemente el número de línea, eliminando la necesidad de proveer el código IMEI.
Asimismo, los usuarios podrán iniciar el proceso de bloqueo en las delegaciones de la policía al momento de presentar la correspondiente denuncia. A la fecha, el sistema que habilita este procedimiento está disponible para la policía civil de los estados de Bahía, Ceará y Espíritu Santo y llegará próximamente a la Policía Federal y los destacamentos de Goiás, Mato Grosso, Río de Janeiro y San Pablo.
Los comerciantes y transportistas también pueden iniciar el proceso de bloqueo en las estaciones de policía para prevenir la utilización indebida de grandes cantidades de nuevos teléfonos móviles sustraídos o robados, aunque en este caso deberán informar los IMEIs de los dispositivos.
El bloqueo se realiza a través del Cadastro Nacional de Estações Móveis Impedidas (CEMI), la base de datos coordinada por Anatel y los operadores móviles que registra actualmente 6,5 millones de equipos inhabilitados. En diciembre de 2014, el CEMI fue integrado a la base global administrada por la GSMA para intercambiar información con las listas negras de otros países miembro.