La empresa Credit Card Services Limitada (CCS) obtuvo en marzo una victoria legal contra la Superintendencia de Telecomunicaciones de Costa Rica (Sutel) tras un conflicto originado en 2009 por el lanzamiento de su plataforma de voz sobre IP (VoIP), informó el periódico El Financiero.
El regulador exigió siete años atrás que CCS suscriba un pacto de interconexión con el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) previo a la comercialización de este servicio. La firma rechazó este mandato argumentando que no era un operador y que solo necesitaba un contrato de acceso.
La sentencia dio por tierra tres resoluciones emitidas por la Sutel y le comandó indemnizar a CCS por el daño causado en materia de “gastos de inversión, y los perjuicios por no haber logrado comercializar los servicios desde setiembre de 2009 y hasta la fecha de su efectivo pago”.
CCS, conformada por capitales costarricenses y estadounidenses, solicitó en la demanda el pago de 21,5 millones de dólares (alrededor de 11.534 millones de colones), aunque la cifra podría modificarse una vez que el perito designado por la Sala Primera concluya su análisis.
“Una vez quede en firme el fallo, el ICE estará en la disposición de brindar cualquier servicio que la empresa CCS solicite, compatible con la legislación vigente”, aseguró Jaime Palermo, gerente de Telecomunicaciones del operador. Desde CCS sostuvieron que ahora están “evaluando el mercado”.
La Sutel registró unos 41.000 accesos de VoIP al cierre de 2014. Tigo alcanzó una cuota del 66 por ciento, seguido por Telecable y Call My Way, con 15 y 11 por ciento, respectivamente. Entre 2010 y 2014, los ingresos pasaron de 231 millones de colones (430.576 dólares) hasta 4.300 millones (ocho millones de dólares).
