Red Compartida: los desafíos de Altan no son sólo de despliegue; el valor del dólar y otros factores se suman como retos

El consorcio Altan se hará cargo del despliegue de la Red Compartida en México tras un largo período de discusiones, alguna de las cuales siguen su camino en la justicia. El bien valorado proyecto presenta objetivos muy altos en términos de cobertura y despliegue, por lo que sortear las barreras que se presenten será clave. El valor del dólar y la burocracia para instalar infraestructura son sólo algunos de los retos; la inteligencia para superarlos marcará, quizás, el éxito o el fracaso de la Red Compartida.

El consultor de Entuizer, José Luis Peralta, opinó en conversación con El Financiero que el despliegue es el primer gran desafío; el consorcio se comprometió a alcanzar una cobertura de 70 por ciento de la población para 2020 y de 92,2 por ciento para 2022. “El principal reto es lograr la cobertura ofertada en las distintas etapas de despliegue de la red, en los tiempos comprometidos y con la calidad que se ha establecido”, agregó.

El dólar y la variación en su cotización despierta también dudas. El peso perdió estabilidad ante la moneda extranjera, que se disparó en los últimos meses. Esto resulta central porque el proyecto está valuado en dólares: se invertirán 7.500 millones.

La demora en la resolución de trámites administrativos para el despliegue o instalación de infraestructura  es una complicación que aparece con frecuencia entre las quejas de los operadores.

El contexto, además, no ayuda. A pesar de que el consorcio se quedó con el proyecto, las constantes quejas de Rivada Networks tiñen de polémica la iniciativa, a lo que se suma que próximamente puedan tomarse como válidas los recursos presentados y generarse demoras en el inicio del despliegue, entre otras posibles consecuencias.

Entre los beneficios, la Red Compartida promete ofrecer banda ancha en zonas remotas o de difícil acceso; dar mayor cobertura a los proveedores de servicio y permitir mejorar su oferta; contribuir a la disminución de precios en diferentes servicios y fomentar la inversión local y extranjera. Solo resta, ni más ni menos, que Altan logre superar los retos que presenta el, para muchos, proyecto más robusto de la historia de telecomunicaciones en México.

Nicolás Larocca es Técnico Superior en Periodismo (TEA) y Locutor Integral (ISER). Durante su carrera profesional se desempeñó en diferentes medios radiales, digitales y en gráfica como productor de contenidos, redactor y analista. Tiene conocimientos en comunicación interna, deportes, bancos y seguros, y desde 2013 se especializa en el mercado de las telecomunicaciones a escala regional.

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