Las causas que generan desplome de la telefonía móvil en Brasil aún son tema de discusión en la industria; mientras algunos culpan a la crisis económica otros hablan de desconexión de terminales en desuso. Sin embargo, en valores nominales no hay debate: hay 43 millones de usuarios móviles prepagos menos que hace dos años.
La Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) registró 247,4 millones de líneas celulares al cierre de octubre, frente a las 273,8 millones informadas un año atrás. Pero la caída se puede observar de mucho antes, desde 2010, y se vio fuertemente apalancada por la reducción de la base prepago, que cayó 13 puntos porcentuales en términos de participación de mercado en el último lustro.
La modalidad postpago se posiciona con un crecimiento sin pausa desde hace más de una década. Se registraron 77,3 millones de líneas postpago a octubre frente a los 72,4 millones del año anterior. Si se compara con 2010, el crecimiento de esta base es de 123 por ciento o 42,7 millones de líneas. Este segmento concentra ya el 31,3 por ciento del mercado frente al 68,7 por ciento de prepagos.
No es el único servicio en baja, también hay una caída considerable en televisión paga y telefonía fija. La banda ancha fija, por ahora, no sigue la tendencia y mantiene un crecimiento constante aunque cada vez más discreto.
Respecto de las tecnologías, LTE es la única que presenta crecimiento interanual y concentra el 21,2 por ciento de las líneas, dos veces más de participación que hace un año (7,4 por ciento). Anatel registró 52,6 millones de líneas 4G y 126,2 millones de WCDMA, entre otras.
Cuatro empresas concentran el 98,2 por ciento del total de líneas móviles informadas. En primer lugar se ubica Vivo (Telefónica), que tiene 73,5 millones de líneas o el 29,7 por ciento. Le sigue TIM (Telecom Italia), con 63,2 millones —25,5 por ciento—, Claro (América Móvil) con 60,5 millones —24,4 por ciento— y Oi —18,4 por ciento—, entre otros proveedores.
