“Bajo el estado actual de competencia efectiva en el mercado de telefonía móvil que impera en El Salvador se recomienda (…) suprimir (de la ley de Telecomunicaciones) la alusión a la fijación de valores máximos aplicables a los servicios de telefonía celular”, señala entre sus conclusiones el “Análisis de la regulación de los precios minoristas de telefonía móvil en El Salvador”, presentado por el Centro de Estudios de Telecomunicaciones de América Latina (cet.la).La normativa actual se justificaría si no hubiera competencia efectiva y determinados agentes abusaran de su posición o bien cuando, pese a existir, la regulación mayorista no se realizara de forma adecuada, expone el informe entre sus argumentos. Agrega que el país cuenta con un marco jurídico en materia de interconexión y una Ley de Competencia adecuada.Añade que mantener las reglas actuales trae como consecuencia un desincentivo para la inversión con fines sociales y económicos y limita la capacidad de lograr mayores niveles de cobertura del servicio, con lo que se reduce la posibilidad de universalizar el acceso a tecnología por parte de los salvadoreños.El coordinador de cet.la, Juan Jung, concluyó: “El cierre de la brecha digital depende en gran parte de la masificación de las últimas tecnologías móviles, y para ello es fundamental flexibilizar los esquemas tarifarios. Esto es clave para la innovación en materia comercial, de forma de lograr ofertas novedosas, creativas, flexibles, que puedan adaptarse a las capacidades de pago y necesidades de todos los usuarios”. Detalló que sólo el 27 por ciento de la población accede a Internet.Para efectuar los cambios solicitados la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget) debería reformar o dejar sin efecto el artículo ocho de la ley de Telecomunicaciones, en el que se indica expresamente que el regulador “determinará el valor máximo tanto de las tarifas básicas del servicio público de telefonía fija y móvil”.