La Comisión Europea impuso una multa por 110 millones de euros a Facebook por dar información falsa o engañosa cuando adquirió WhatsApp. La empresa había asegurado que no se podían vincular los perfiles de la aplicación de mensajería con los de sus usuarios pero lo hizo dos años después, cuando cambió su política de privacidad.
Margrethe Vestager, comisaria de Competencia, agregó que la empresa “hizo lo que dijo que no se podía hacer” e incurrió en dos infracciones: la primera tiene que ver con en el formulario de concentración y la otra con la respuesta de la empresa ante el pedido de la Comisión Europea.
La decisión no afecta ni pone en riesgo la autorización de la adquisición, agregó Télam.
La sanción se dio a conocer con el argumento de que Facebook conocía la posibilidad técnica de conectar las identidades de los usuarios en ambas aplicaciones y que incluso los empleados de la red social eran conscientes de esta posibilidad. Facebook aseguró que los errores no fueron intencionales pero no apelarán la decisión.