El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación definió, junto con el Banco Nacional de Desarrollo (BNDES) y la Cámara de IoT, y con apoyo de la consultora McKensey, las objetivos prioritarias que atenderá el Plan Nacional de Internet de las Cosas en Brasil. De las 10 verticales estudiadas fueron seleccionadas tres prioritarias: salud, ciudades y áreas rurales, destacó el portal local TeleSintese.
El proyecto se dio a conocer a mediados de 2015 y ya pasó por instancias de consulta pública. Si bien se definieron áreas claves, la iniciativa tendrá como objetivo general que Brasil sea líder en Internet de las Cosas tanto en el segmento de desarrollo tecnológico, como en cuanto a oferta y demanda.
Sobre la elección de las áreas específicas, Ricardo Rivera, coordinador del plan y gerente del Departamento de Industrias de TICs del BNDES, dijo que se optó por aquellas “que puedan posicionar al país con nuevas tecnologías, nuevos negocios y una modernización de la oferta como forma de incentivar su internacionalidad”. Se analizaron 120 casos de uso para evaluar los impactos económicos, de productividad y empleo que tenía cada vertical.
También se definieron “frentes movilizadores”, que son fábricas o industrias en la que se llevarán a cabo pruebas piloto y que funcionarán como catalizadores de crecimiento de la industria IoT. Entre ellas se destacaron el sector automotriz y textil, así como la industria minera y de óleo y gas.