El Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) concluyó el proceso de revisión para determinar si los operadores móviles cumplieron con el proceso de apagón telefónico, que consistió en inhabilitar líneas que forman parte de la “lista negra” por ser previamente denunciadas por robadas o denunciadas. En total, se dieron de baja 901.931 celulares.
Tras dar aviso a los titulares de las líneas hasta 24 horas antes de proceder a su inhabilitación, Bitel (Viettel) bloqueó 546.379 equipos, el 60 por ciento del total; Claro (América Móvil) 162.730, el 18 por ciento; Movistar (Telefónica) 143,174, el 16 por ciento, y Entel 49.648, el seis por ciento.
En el informe, el regulador detalló que hubo 550 IMEIs que figuraban en la lista negra pero no fueron bloqueados. De ellos, 256 correspondían a Bitel, 231 a Movistar y 54 a Claro. En estos casos los equipos fueron reportados como recuperados por los operadores móviles, por lo que dejaron de ser parte del listado.
El bloqueo de dispositivos es una herramienta utilizada con el objetivo de frenar los robos y el crecimiento del mercado ilegal de teléfonos. Además de Perú, esta opción funciona en otros países de la región como Colombia, donde el regulador bloqueó más de tres millones de equipos cuyos titulares no estaban registrados.