El Estado es dueño del 86,3 por ciento de la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB) luego de que, en 2013, se desprendiera del 13,7 por ciento. La enajenación del porcentaje restante aparece como una de las prioridades del alcalde Enrique Peñalosa, que también estaba al mando hace cinco años. Su administración confía en que se la operación puede definirse a mitad de año.
En julio pasado un juez suspendió la venta por supuestas fallas en el proceso. La oposición y los trabajadores tomaron la decisión como una victoria mientras que el oficialismo dijo inmediatamente que apelaría la decisión. Lo hizo tiempo después ante el Tribunal de Cundinamarca, que ahora debe expedirse.
“Aunque los términos son definidos exclusivamente por la autoridad judicial pertinente, que en este caso es el tribunal de Cundinamarca, esperamos que se resuelva a mitad de año”, dijo la secretaria de Hacienda de Bogotá, Beatríz Arbeláez. Sus declaraciones fueron tomadas por el periódico local La República.
La funcionaria resaltó que se presentaron varias pruebas para que el alto tribunal ceda y avale la enajenación de acciones con el objetivo de mejorar el flujo de caja de la empresa colombiana. ETB registró pérdida por 130.000 millones de pesos (47,6 millones de dólares) en 2017. El Ebitda anual se ubicó en 530.000 millones de pesos (194,2 millones de dólares) con un margen de 36 por ciento. Los costos y gastos, en tanto, totalizaron 928.000 millones de pesos (340,1 millones de dólares).
