Los cuatro operadores con más usuarios de Brasil se muestran atentos a los movimientos de sus competidores. Ahora el turno fue de la filial local de América Móvil, que acaba de ser aceptada como tercera interesada en el análisis que el Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade) hará sobre el acuerdo que firmaron Tim y Vivo para compartir infraestructura. En tiempos de consolidación, cualquier movimiento es relevante y cada firma tiene su diablo para meter la cola en el jardín de los vecinos.
El acuerdo de compartición entre TIM y Vivo fue anunciado en julio del año pasado pero pasó a los papeles en los últimos días de diciembre. Involucra 2G, 3G y 4G y alcanzará a 2.700 ciudades, el 48 por ciento del país. Se divide en partes, por un lado la creación de una red móvil única de tecnología 2G y por otro la creación de una red única 3G y 4G en sitios de hasta 30.000 habitantes. El proyecto tendrá una primera etapa de seis meses y luego podrá extenderse en tiempo y cobertura.
Claro entra a la historia porque la operación anunciada debe ser aceptada por parte de las autoridades competentes, lo mismo que ocurrió con alianzas previas de compartición de infraestructura por parte de operadores brasileños. La empresa de la familia Slim pidió ser parte del análisis al considerar que falta claridad al acuerdo y, tal como está previsto, genera riesgo de limitar la competencia. Considera también que la unificación de redes puede generar disminución de la infraestructura existente y eso impactará de forma negativa a los usuarios en ciertas zonas.
La decisión de la filial de América Móvil, reportada por TeleSintese, es exactamente la misma que tomaron sus rivales en el acuerdo que llegó con NII Holdings para quedarse con Nextel y sus filiales en el país. Justamente fueron Vivo y TIM quienes se mostraron en contra de la operación en tanto que Oi lo observó como un movimiento natural del mercado. Los argumentos de los detractores, sin embargo, no fueron suficientes para cambiar la luz verde por parte de autoridades, aunque sí alteró los plazos previstos.
