La filial salvadoreña de Millicom ya había anunciado inversiones por 1.000 millones de dólares para el período 2017-2020 pero los movimientos que se avecinan en el mercado generaron algunos cambios en su plan en el corto plazo. En este contexto, la empresa anunció un desembolso de 130 millones de dólares para este año, de un total de 500 millones de dólares que pondrá en juego este lustro.
El dinero se pondrá a disposición de las necesidades de la empresa para la ampliación de cobertura de servicios de voz y datos, el incremento de velocidades, la expansión de la red LTE y el encendido de LTE-A en más zonas del país, pues eso ya funciona en San Salvador, Santa Ana, San Miguel, La Unión y La Libertad, indicaron sus autoridades en diálogo con el portal El Economista.
Edgar Grande, su gerente General, indicó que van a ampliar la cobertura en todo el país para dar servicios de voz y datos al 92 por ciento de los salvadoreños. Mientras tanto, la idea es llegar con 4G al 90 por ciento de la población y con LTE-A al 60 por ciento. También se incluye entre los planes la construcción del primer Datacenter Tier 3 del país.
La compañía acaba de adquirir 50 MHz de espectro para móviles en las bandas de 1710-1770 y de 2110-2170 MHz. Se quedó con cinco bloques de igual proporción por adjudicación directa. Aunque no se hicieron públicas las ofertas, cada bloque tenía un precio base de 6,2 millones de dólares. También se hizo de porciones su competidor Claro, que debió pujar para hacerse de cuatro bloques en la misma banda.
El anuncio de inversiones de la empresa se da justo mientras las autoridades locales analizan la compra de la filial local de Telefónica por parte de América Móvil. La operación se encuentra en revisión por tercera vez, tras dos solicitudes que fueron denegadas por problemas en los papeles. Cuando se convierta en un hecho, la competencia será entre dos gigantes y uno de ellos muestra sus garras para lo que promete ser una lucha de titanes.
