La Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) confirmó que a partir del primero de enero del próximo año, comenzará a confeccionarse la base de datos con todos los reportes de celulares robados, así como aquellos que se encuentren funcionando de manera legal.
Según publicó La Tarde, los teléfonos que actualmente se encuentren operando en redes nacionales deberán ser reportados al operador correspondiente para que se tome registro del número de IMEI y los datos personales del usuario, sin importar si fueron adquiridos en el exterior, de segunda mano o si fueron financiados por alguna compañía.
Bajo la nueva normativa, todos aquellos equipos que acumulen medio año o más tiempo sin usarse, serán bloqueados al momento de la activación, salvo que el dueño pueda demostrar a través de la presentación de la factura que la compra se realizó de manera legal.
Si bien la recopilación de los datos para la confección de la base de datos es responsabilidad de los operadores móviles, las autoridades colombianas enfatizaron la necesidad de que los usuarios se acerquen a los centros de atención y actualicen sus datos.
Durante este año, el Ministerio TIC colombiano logró que la Comisión Interamericana de Telecomunicaciones (CITEL) apruebe la propuesta de crear un frente regional para enfrentar el hurto de dispositivos móviles y la intención es extender la acción conjunta al resto de los países de la región.
Además, el país firmó acuerdos bilaterales con México y Ecuador para combatir en conjunto el hurto de celulares.