Además de ofrecer telefonía fija y televisión –pese a algunas trabas– en las localidades del interior de Argentina, las cooperativas ahora apuntan a la telefonía móvil. La Cámara de Cooperativas de Telecomunicaciones (Catel) presentó ante la prensa su propio de telefonía móvil basado en un sistema experimental GSM y realizó una prueba en tiempo real sobre una red de testeo.
La frecuencia elegida para realizar la demostración había sido habilitada por la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC). Se concretaron enlaces entre celulares de la misma red cooperativa, entre uno de esos móviles, a una línea que opera bajo redes de Movistar y a un teléfono fijo.
“No tiene sentido ser un Movistarcito o un Clarito”, sentenció Darlo Oliver, presidente de Catel y gerente general de Telpin, según registró César Dergarabedian para Iprofesional.
La intención de las cooperativas es que cada una pueda administrar su propia red móvil dentro de su zona geográfica y que a través de políticas estatales se cree un marco de roaming para que el cliente de una cooperativa pueda tener el servicio cuando ingrese en la red de otro prestador cooperativo.
Las cooperativas no podrán participar de la licitación de los sobrantes de 800 MHz y 1900 MHz que se llevará a cabo durante el primer cuatrimestre de este año, espectro que quedó liberado tras la compra por parte de Telefónica de los activos del Movicom. Por este motivo, apuntan a que las autoridades le permitan participar en la licitación del dividendo digital tras el apagón analógico propuesto por la Televisión Digital Terrestre (TDT).