El terremoto de 6,8 grados en la escala Richter que golpeó al país andino fue una prueba para los operadores de telecomunicaciones. Según la Subsecretaría de telecomunicaciones (Subtel) las compañías pudieron superarla sin mayores inconvenientes.
“Todas las centrales y antenas celulares de las compañías telefónicas en las zonas afectadas, que sufrieron cortes del suministro eléctrico proporcionado por las empresas eléctricas (23 por ciento del total), siguieron funcionando con sus propios sistemas de respaldo energético”, detalló la entidad a través de un comunicado.
Sin embargo, existió cierto colapso en el tráfico ya que se observó un “crecimiento explosivo” de la demanda de los usuarios que congestionó la red telefónica para las llamadas durante más de 120 minutos a partir de las 20 horas.
Los números concretos indican que el tráfico de llamadas se incrementó en un 148 por ciento en relación a día promedio, lo que explica la dificultad para establecer las conexiones.
En tanto, el tráfico nacional e internacional de internet creció 62 por ciento, pero los servicios de banda ancha funcionaron normalmente.
La Subtel ha expresado que las aplicaciones “como mensajería del tipo whatsapp o el uso de redes sociales son excelentes opciones para comunicarse en emergencias”.
Sin embargo, las autoridades remarcaron que se iniciaran cargos en contra de Movistar, Claro y Entel por no hacer entrega en tiempo y forma de la información que exige la normativa sectorial para casos de emergencia.