En septiembre del año pasado, Une EPM inició un proyecto para convertir sus teléfonos públicos en hotspots Wi-Fi, en el marco del desarrollo de su estrategia de metro Wi-Fi. Los teléfonos con Wi-Fi, que actualmente suman cerca de 1.500 en las ciudades de Medellín y Manizales, se distinguen con la calcomanía “Zona Wi-Fi gratis para clientes Une”.
Une EPM dice que los teléfonos públicos aún son rentables, gracias a una serie de innovaciones aplicadas, que van desde mejoras en el diseño para combatir el vandalismo, tarifas competitivas para comunicaciones devoz, hasta la posibilidad de utilizarlos para recargar saldo en teléfonos móviles, enviar SMS o correos electrónicos, según explica a TeleSemana.com Diego Mauricio Serna, director de telefonía pública de Une EPM.
El desarrollo de metro Wi-Fi como forma de fidelizar al cliente es algo que comienza a verse cada vez más en América Latina. Algunas empresas, como el cableoperador argentino Fibertel con su proyecto Fiberzone, GVT en Brasil o incluso más recientemente ETB también en Colombia, son algunos de estos casos.
Une EPM tiene actualmente unos 1.500 hotspots instalados en teléfonos públicos ya funcionando, en las ciudades de Medellín y Manizales. “El proyecto es llegar a todas las ciudades donde tenemos cobertura. Para este año, tenemos proyectado alcanzar unos 3.000 puntos”, explica Serna.
¿Cómo comenzó esta iniciativa?
Empezamos a implementar este proyecto desde septiembre de 2013, y comienza con la idea de sacar el servicio de Internet de los hogares hacia las personas, es decir, que los clientes de Internet de Une EPM puedan llevar el servicio consigo fuera del hogar.
Hoy tenemos ya TV online, y los clientes pueden llevar ese servicio también en su teléfono inteligente. Y lo mismo Internet, que puedan tenerlo fuera del hogar con el hotspot Wi-Fi.
¿Tiene costo adicional?
No, es una estrategia de fidelización, entregarle más valor al cliente por el mismo precio.
¿Cuánto cuesta dotar a un teléfono público de un hotspot Wi-Fi?
Realmente es un costo de OPEX, porque el CAPEX es relativamente bajo. Porque lo que hacemos es, donde tenemos ya redes —el teléfono público—, lo aprovechamos para montar un equipo DSL. Entonces el CAPEX, que es el DSL, está alrededor de 100 dólares. Y el OPEX son otros 50 dólares por instalación. Entonces cuenta unos 150 dólares la instalación por teléfono público, más lo que cuesta tener operativamente un acceso Wi-Fi permanente en estos dispositivos, ya es el costo operativo, que podría estar en unos 50 dólares mensuales, que es el costo que tenemos por acceso más o menos.
¿Quién ha sido el proveedor de equipos para este proyecto?
Son varios. En algunos puntos, donde no hay muy alto tráfico, hay equipos DSL marca Cisco. En otros puntos tenemos equipos HFC marca Huawei. Y tenemos un equipo robusto, ya carrier class, para sitios de alta concentración de personas, para hasta 300 usuarios simultáneos, y que podemos hacer configuración en malla y todo eso, también marca Cisco.
¿Tienen referencias de iniciativas similares en otros países?
Sí, estuvimos haciendo unos estudios con los proveedores de equipos. Paraguay, Brasil, Argentina, tienen una solución parecida. Los operadores fijos están haciendo redes metro Wi-Fi para sus clientes de redes fijas.
Lo interesante es el reaprovechamiento de los teléfonos públicos, que en la región en general van en disminución o desaparición…
Nosotros en Une EPM le hemos apostado mucho. Hoy nosotros generamos muy buenos ingresos desde los teléfonos públicos. Desde nuestros teléfonos públicos hoy tenemos aproximadamente 25 millones de minutos mensuales de tráfico, un número importante, con unos ingresos también importantes y con un negocio que hoy todavía tiene una rentabilidad por encima del 50 por ciento.
¿Hay otras estrategias para mantener la rentabilidad de los teléfonos públicos?
Sí. A nuestros teléfonos públicos los hemos trabajado mucho. Hoy tenemos desde los teléfonos públicos, además de llamadas a las redes locales, llamadas internacionales a precios muy económicos —0,1 dólares el minuto en llamadas a Estados Unidos—, llamadas a móviles muy baratas, muy competitivas frente a un teléfono prepago. Y además de eso, desde el teléfono público se puede enviar SMS a móviles y correos electrónicos.
Desde el año pasado, además, tenemos desarrollado sobre teléfonos públicos una opción adicional que es recargas de las líneas móviles de Une EPM. Nosotros tenemos aproximadamente 100.000 clientes con nuestro servicio virtual (MVNO), en la red de Tigo, y los clientes de Une pueden recargar su línea en los teléfonos públicos. Éstos han sido desarrollos adicionales tratando de potenciar más el uso de los teléfonos públicos.
Este servicio de recarga es muy fácilmente replicable para otro operador, entonces ahora en la muy probable fusión Une-Millicom, todos los clientes Tigo, los más de siete millones de clientes prepago de Tigo, podrían recargar mediante teléfonos públicos, pagando con monedas. Un cliente puede recargar por operación hasta ocho monedas, según la denominación. Esto le permite recargar desde 200 pesos (unos 0,10 dólares) hasta aproximadamente 4.000 pesos (cerca de dos dólares). Esta transacción se hace por IVR, y la recarga es inmediata.
¿Cuántos teléfonos públicos tiene Une EPM en todo el país?
En este momento tenemos 12.500 teléfonos públicos. De este total, 1.900 son sin costo para el cliente. Tenemos desde hace mucho tiempo un plan de responsabilidad social en el que, en los barrios de menor capacidad económica, más vulnerables y zonas rurales, tenemos teléfonos sin cobro. Entonces hay 10.600 teléfonos inteligentes con todos estos servicios, y 1.900 teléfonos gratuitos.
¿Cuáles ve como las principales amenazas para la telefonía pública y cómo se lucha contra eso?
La principal amenaza es el vandalismo. En Colombia, está muy centrado en tratar de obtener monedas del teléfono, introduciendo pedazos de papel para que las monedas queden trancadas. Nosotros hemos innovado en muchas cosas, hemos desarrollado internamente una entrada de monedas especial, que tiene varias cosas importantes. Una de ellas es que si alguien tranca el teléfono, el usuario nunca pierde la moneda. Tiene un diseño especial para que el cliente nunca pierda su dinero. Si el usuario no pierde la moneda, se desincentiva el vandalismo.
Yo estoy instalando estos dispositivos desde noviembre del año pasado, y he tenido una efectividad de casi el 100 por ciento evitando el vandalismo.
Lo otro que se requiere es mucha presencia. Nuestros mecánicos están constantemente visitando el teléfono para mantener un alto grado de disponibilidad.
Usted decía que para Une EPM es un negocio rentable todavía la telefonía pública, ¿cuánto representa para la empresa?
Nosotros hoy, a grandes rasgos, generamos en ingresos más o menos 17 millones de dólares anuales con los teléfonos públicos, casi 1,5 millones de dólares mensuales.
