AT&T México extendió la cobertura de 4G a un total de 32 ciudades. El servicio ya está disponible en Aguascalientes, Arandas, Atlacomulco, Cadereyta, Cancún, Cardel, Celaya, Córdoba, Cuautla, Cuernavaca, Guadalajara, Guanajuato, Huamantla, Irapuato, Jalapa, León, Monterrey, Orizaba, Pachuca, Puebla, Querétaro, Salamanca, San Juan de los Lagos, San Juan del Rio, San Luis Potosí, San Miguel de Allende, Silao, Tepeji del Rio, Tepatitlán, Toluca, Tulancingo y Veracruz.
El anuncio supone que la compañía recortó la distancia que la separa de Movistar (Telefónica), su más cercano competidor, que se había comprometido a cubrir 50 ciudades con LTE a finales de 2015. Telcel (América Móvil) mantiene un amplio liderazgo sobre ambas, alcanzando más de 14.500 localidades a escala nacional y cubriendo a casi 70 millones de personas.
AT&T quiere una red que ofrezca conectividad LTE continua en ambos lados de la frontera de Estados Unidos y México. En principio, priorizará las zonas urbanas y carreteras por sobre las áreas rurales y destinos turísticos populares. Al cierre de 2015, la compañía preveía brindar cobertura LTE a 40 millones de personas, cifra que se incrementaría hasta 75 millones en 2016 y 100 millones en 2018, gracias a un plan de inversiones de 3.000 millones de dólares.
Datos oficiales a marzo del año pasado revelan la existencia de 103 millones de líneas móviles en el país. Telcel lideraba con una cuota del 69,46 por ciento, seguida por Movistar, con 21,6 por ciento y AT&T (Iusacell, Unefon y Nextel), con 8,74 por ciento.
