Ericsson parece mostrar que los enlaces de microondas gozan de buena salud. La compañía sueca anunció que recientemente instaló una conexión de microondas entre un sitio de agregación óptica y una estación base de T-Mobile en Praga, República Checa, capaz de entregar 10 Gbps. La conexión utiliza la solución MINI-LINK 6352 en la banda de 70/80 GHz con una configuración de agregación de dos portadoras. En total, el sistema tiene una extensión de 4,58 kilómetros.La solución permite demostrar el potencial de las ondas de microondas para conectar estaciones base, sin necesidad de acudir a soluciones fijas como fibra óptica. Ericsson asegura, además, que su tecnología MINI-LINK 6352 es capaz de entregar alta capacidad con baja latencia, lo que le permitiría ser utilizado también en futuras redes 5G.