La cercanía de 5G NR incrementa las proyecciones entorno a conexiones 5G

A principios de año, 3GPP anunció que adelantaría los tiempos de desarrollo del estándar de la próxima generación móvil, con un primer lanzamiento de una versión de radio 5G (5G NR) —anclado en el core actual LTE— en diciembre de 2017, con perspectivas de tener un estándar definitivo para mediados de 2018. Los fabricantes ya están probando equipos basados en lo que será el release 15 del 3GPP y ya aparecen los primeros prototipos de módems, que saldrán a la venta en los próximos dos años.

Esta situación pone las expectativas de la industria altas. Las primeras redes de la versión “no independiente” de 5G se esperan para 2019, especialmente en países avanzados como Estados Unidos, Corea del Sur, Japón o incluso China. En su reciente reporte del mercado móvil, Ericsson asegura que ya en 2020 habrá grandes despliegues de 5G, alcanzando una cobertura del 20 por ciento de la población mundial tres años más tarde.

Esta aceleración de los tiempos marca que ya para 2023 tendremos unos 1.000 millones de suscripciones 5G, 450 millones más de lo que la compañía esperaba para 2022. Y estas cifras son únicamente de banda ancha móvil enriquecida, ya que Internet de las Cosas (IoT) y los accesos fijos soportados por redes 5G —lo que se conoce como Fixed Wireless Access (FWA)— no fueron contabilizados dentro de la categoría.

Ericsson estima unos 30.000 millones de dispositivos conectados para 2023, de los cuales 20.000 millones estarán relacionados con IoT. Estas cifras demuestran que ha bajado la expectativa sobre IoT con respecto a su etapa temprana, cuándo se pronosticaban unos 50.000 millones de dispositivos para 2020 y 100.000 millones para 2025 —cabe preguntarse si lo que está ocurriendo con IoT sucederá también con las previsiones sobre la 5G—.

Ericsson sostiene que en los próximos cinco años los dispositivos IoT crecerán a un ritmo compuesto anual (CAGR) del 19 por ciento, impulsado por la baja de precios y la creación de nuevos casos de uso.

El reporte tiene un dato interesante, ya que divide a los dispositivos de Internet de las cosas en aquellos de corto alcance —short-range— y los que se conectarían a redes de área amplia —wide area—. Los primeros, con un alcance de hasta 100 metros, son los más difundidos hoy en día con 6.400 millones de conexiones a nivel mundial. Se trata de dispositivos que se conectan a redes Wi-Fi, Bluetooth y Zigbee, y que crecerán a un ritmo del 18 por ciento hasta alcanzar 17.400 millones en 2023.

Los dispositivos que requieren de conexiones celulares y de tecnologías de bajo consumo de energía como Sigfox o LoRa, en tanto, totalizaron 600 millones en 2017. Para 2023, la compañía sueca estima 1.800 millones de dispositivos IoT conectados a redes celulares, un 75 por ciento de la categoría de redes de área amplia. Al cierre de 2017, Ericsson estima habrá unos 500 millones de conexiones celulares IoT.

Actualmente, la mayoría de las conexiones máquina a máquina (M2M) y IoT están soportadas por redes GSM/GPRS.  Sin embargo, para 2023, Ericsson estima que las conexiones LTE —especialmente en su modalidad Cat-M1 y NB-IoT— dominarán el mercado —ya hay cerca de 20 redes comerciales desplegadas y en 2018 los operadores latinoamericanos se sumarán con nuevos lanzamientos—. En segundo lugar, aparece la tan ansiada 5G, que será utilizada principalmente en aplicaciones que requieran de comunicaciones de misión crítica.

Leticia Pautasio es periodista y Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Quilmes (Buenos Aires, Argentina). Durante su carrera profesional se desempeñó en gráfica, radio y medios de comunicación en línea. Desde 2009 se especializa en tecnología, telecomunicaciones y negocios; cubriendo la realidad del sector en América latina. En 2013 obtuvo el diplomado "El Periodista Latinoamericano como agente y líder en el desarrollo social" del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (México). Contacto: [email protected]

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