Competir con compañías como Spotify y responder al pedido de la industria de la música para obtener más ingresos desde su plataforma son los dos puntos que llevan a YouTube a lanzar su propio servicio pago de música, que estará disponible a partir de marzo según Bloomberg.
El proyecto se conoce internamente con el nombre Remix y ya se avanzó en un acuerdo con Warner Music Group, al tiempo que ya hay conversaciones con Sony Music Entertainment, Universal Music Group y el consorcio de sellos independientes Merlín. La empresa también contactó a artistas para contar con ayuda en la promoción.
El servicio incorporaría a las canciones elementos que ya pueden verse en la plataforma de vídeos, como clips o conciertos. Google ya había hecho intentos similares previamente, al introducir el servicio de reproducción Google Play Music, en 2011, y YouTube Music Key, en 2014, que posibilitaba a suscriptores ver videos musicales sin anuncios.