A tres puntos apuntó el presidente del Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), Rafael Muente, al ser consultado sobre los próximos pasos que dará el regulador de cara al 2018: condiciones de uso, portabilidad y televisión por cable.
Sobre las condiciones de uso, Muente dijo que espera que “el año próximo año tengamos una norma integral, más asequible al usuario y menos técnica”, a través de la aplicación de cambios a la reglamentación vigente. Algunos serán para facilitar los mecanismos de contratación, otros para evitar problemas con usuarios y también se tocará el llamado tope de consumo, utilizado por algunas empresas.
En portabilidad se busca perfeccionar el sistema, sostuvo Muente en diálogo con Gestión Perú, a través de mecanismos que eviten que los usuarios “jueguen” trasladándose de un operador a otro constantemente generando situaciones que pueden perjudicar a la empresa donante y receptora. A la vez, se intentarán resolver problemas particulares, como los casos en que las empresas ofrecen un celular atado a la contratación de un servicio y las deudas de los clientes. “Las deudas no deben afectar la portabilidad”, dijo el funcionario.
Por último, la última norma a prepublicarse en los próximos días es la referida a los decodificadores, uno de los temas que fue eje de debates entre el regulador, los concesionarios y organismos de Defensa al Consumidor. El objetivo de esta norma será evitar que los decodificadores que se usan para para televisión paga puedan ser vendidos o alquilados por separado del servicio.
La Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec) había pedido, en mayo pasado, explicaciones al regulador por reiteradas quejas de clientes de Movistar, Claro y Directv y sugirió que la desagregación tenía como intención ocultar el aumento de tarifas. Osiptel respondió diciendo que la práctica era “inadecuada” y aseguró que trabajaría en una norma en este sentido.
