La norteamericana AT&T anunció la semana pasada que ha completado las actualizaciones de software de red necesarias para respaldar el despliegue de su red LTE-M en México, prevista para finales de este año.
La implementación se suma a la red LTE-M que la compañía ya desplegó en los Estados Unidos, siguiendo su estrategia de unificar infraestructuras para crear un área de cobertura única para toda Norteamérica.
Durante el tercer trimestre del año, la compañía había realizado pruebas pilotos de LTE-M en Tijuana y Puebla, México, y en agosto se probó la sesión de datos de roaming internacional LTE-M entre Estados Unidos y México.
AT&T afirma que la red LTE permite mejorar la cobertura en interiores y lugares subterráneos, una mejor duración de batería y módulos de operación de menor tamaño. Entre los posibles casos de uso de la tecnología, la norteamericana señala ciudades inteligentes, monitoreo de mercancía, alarmas de seguridad, gestión de activos y administración de la cadena de suministro.
En México, AT&T ya ha realizado pruebas de IoT con la implementación de una solución de un sistema de vigilancia y seguimiento por video en un mercado de la Ciudad de México. Además, recientemente firmó un acuerdo con el Instituto para el Desarrollo y Financiamiento del Estado (Idefin) para instalar soluciones de IoT en el estado de Quintana Roo, una de las zonas más turísticas del país.
