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Latinoamérica tiene cada vez tiene menos margen para cerrar la brecha digital
Lacigf 18 – Uno de cada dos latinoamericanos no está conectado. La región tuvo avances significativos, con crecimiento en accesos, velocidad y reducción de precios pero aún presenta desafíos inmensos en el objetivo de cerrar la brecha digital. “Latinoamérica está a tiempo, pero cada vez tiene menos”, sintetizó Pablo Bello, director Ejecutivo de Asiet, en el marco del panel en el que se discutió realidad y desafíos de la economía digital.El bloque latinoamericano es el que menos creció en materia de productividad en los últimos 20 años y esas dos décadas presentaron “condiciones favorables que no se van a repetir en el corto plazo”. Por eso, si no se avanza en este sentido, el crecimiento será hasta 50 por ciento más bajo en los próximos 15 años. En este contexto desalentador, dijo Bello, “la digitalización para la transformación productiva debe ser la política económica más importante a abordar por los gobiernos locales”.Todos los oradores del panel “Economía Digital, claves en el desarrollo del entorno digital” coincidieron en indicar que el punto de partida es comprender que los conectados son privilegiados y el resto está en serios problemas. El curso normal de Latinoamérica es el subdesarrollo y para saltar esa barrera es necesario esforzarse en distintos niveles, ser ordenados, definir parámetros y, al mismo tiempo, crear soluciones capaces de adaptarse a los constantes cambios.Adela Goberna, representante de la Asociación Latinoamericana de Internet (ALAI) hizo énfasis en la importancia que tiene la economía de datos para empresas de pequeño porte mientras que Carolina Mendoza, del Instituto Panameño de Derecho y Nuevos Tecnologías (Ipandetec) consideró fundamental que en las políticas públicas y debates sobre el tema se tenga como premisa la protección de los derechos que escapan a lo digital, como la seguridad.Fernando Rojas agregó, en representación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que es clave que exista una armonización de los objetivos como bloque regional y, en consecuencia, se logre un avance en materia regulatoria. El resto de los oradores apoyaron esta idea y pidieron reglas horizontales, flexibles y claras que fomenten el desarrollo sectorial.