Algar Telecom presentó los resultados correspondientes al segundo trimestre, en el que obtuvo una ganancia líquida de 79,9 millones de reales (20,6 millones de dólares). El número es 22,5 por ciento superior al informado un año atrás. El Ebitda aumentó 23,6 por ciento hasta 255,6 millones de reales (65,8 millones de dólares) con un margen de 36,2 por ciento.
Las inversiones treparon por encima del 37 por ciento y totalizaron 134,4 millones de reales (34,6 millones de dólares). El 82 por ciento del dinero se utilizó para la expansión de redes y clientes, el 13 por ciento para mantener su operación y el cinco por ciento restante para negocios fuera de las telecomunicaciones. El uso de recursos prácticamente no presenta cambios frente a los 98 millones de reales (25,2 millones de dólares) invertidos en igual trimestre anterior.
La facturación líquida de la firma aumentó 5,2 por ciento anual aunque los 705,8 millones de reales (181,8 millones de dólares) presentados estuvieron apenas por debajo de lo mostrado en el período enero-marzo. El segmento de telecomunicaciones generó una facturación de 665,4 millones de reales (171,4 millones de dólares), el 57 por ciento del negocio B2B y el 43 por ciento del B2C. El resto de la facturación provino de otros segmentos. Al resultado bruto se le restaron impuestos por 202,4 millones de reales (52,1 millones de dólares) para el obtener el neto definitivo.
La compañía cerró el trimestre con 3,82 millones de unidades generadoras de ingresos (UGIs) y 2,28 millones correspondieron al mercado B2C. En ese apartado, incrementó 7,7 por ciento el número de accesos a banda ancha fija hasta 457.000, de los cuales prácticamente la mitad navegó a más de 10 Mbps. Contabilizó 543.000 unidades de telefonía fija y 87.000 de televisión paga. Su base móvil cayó 1,8 por ciento hasta 1,19 millones, a pesar de un incremento en la modalidad pospago, que pasó a representar el 27,6 por ciento del total.
Algar Telecom adquirió la semana pasada el lote 2 de activos del brazo de telecomunicaciones de la Compañía Energética de Minas Gerais (Cemig) por 77,8 millones de reales (20,7 millones de dólares). En julio, además, se oficializó el movimiento por el cual Archy LCC, una afiliada GIC Special Investments —Fondo Soberano de Singapur — ingresó como accionista minoritario de la compañía quedándose con el 25 por ciento del capital social y votante. La operación se concretó por unos 1.000 millones de reales (257,6 millones de dólares).
