Los problemas financieros que arrastra la estatal de telecomunicaciones Hondutel generan un sinfín de hipótesis sobre su futuro. La opción de que se ponga a la venta no es nueva, ya figuraba entre las posibilidades años atrás, pero tomó fuerza en los últimos meses como producto de un déficit cada vez mayor. El gobierno local, sin embargo, descartó que esta idea sea cierta.
El presidente de la Junta Directiva del operador y subsecretario de Inversión y Crédito Público de la Secretaria de Finanzas (Sefin), Tomás Cálix, admitió que la situación es problemática pero negó que el cierre fuera un escenario posible. “Son rumores que causan daño a la reputación de la empresa y a las personas que la dirigen. Esto debe terminarse”, indicó en diálogo La Tribuna.
El ejecutivo señaló que “el déficit anda por alrededor de los 140 millones de lempiras (5,7 millones de dólares) pero se están buscando soluciones; se le pidió a la gerencia que busque un plan de rescate y en el corto plazo vamos a tener respuesta”. Hace algunas semanas, la cúpula del operador había anunciado la búsqueda de inversión externa para revertir la situación.
La crisis de la estatal tiene larga data a pesar de que entre 2015 y 2017 había logrado equilibrar sus finanzas aplicando un plan de austeridad que incluyó cambios en la cúpula gerencial y despidos de personal. Los números volvieron a rojo a partir de enero de este año. Al cierre del primer semestre, la compañía contaba con 368.536 servicios activos, de los cuales 335.883 eran de telefonía fija, 9.471 usuarios móviles y otros 23.000 de banda ancha.
