El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, promulgó la ley 6.207 y el país ahora cuenta con un Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación. Así se llamará finalmente una cartera con objetivos amplios y funciones controvertidas en los ojos de una oposición que mostró su desacuerdo.
El nuevo ministerio se identificará con las siglas Micit y será el resultado de la fusión entre la Secretaria Nacional de Tecnologías de Información y Comunicaciones (Senatics) y la Secretaría de Información y Comunicación para el Desarrollo (Sicom). El ahora ex titular de éste último, Alejandro Peralta Vierci, juramentó como ministro del Micit.
Peralta Vierci ya había sido marcado como candidato con más chances de asumir el cargo luego de que Senatics perdiera la batalla por ganar rango de ministerio y que la Sicom quede como una de sus dependencias. En diálogo con TeleSemana.com, el ejecutivo indicó hace algunas semanas que esperaba que el ministerio comience a funcionar de fin de año.
El ministerio tendrá como objetivo elaborar, promover, implementar y supervisar las políticas públicas y proyectos de los sectores de tecnología y comunicaciones, así como facilitar el uso de las tecnologías de la información y promover el acceso en igualdad de oportunidades a todos los habitantes del país. Innovación y economía digital son otras palabras que aparecen en el documento aprobado.
Tendrá sede en Asunción con opción de establecer dependencias departamentales. Absorberá recursos, entre otros, del Fondo Nacional de Tecnologías de la Educación y un 50 por ciento del fondo de Servicios Universales. Deberá, además, funcionar como nexo entre el Estado y la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) y la Compañía Paraguaya de Comunicaciones (Copaco).
La iniciativa recibió fuertes críticas de la oposición cuando fue tratado pero no se oyeron voces de la industria al respecto. Los detractores basaron su reclamo en que el Mctic se establecerá como una megaestructura —lo llaman “Superministerio”— desde la que el gobierno podrá beneficiar a actores afines y hasta fungir como juez y parte en cuestiones relacionadas con el operador estatal. Tanto Peralta Vierci como titular de Conatel, Andrés Manuel Gubetich, negaron en diálogo con este medio que haya objetivos paralelos a los detallados en el proyecto.
