Los dispositivos vestibles ya han demostrado que no son solo moda. Si alguien tenía dudas de ello, seguramente habrá encontrado respuesta en alguno de los dispositivos presentados durante la última feria de móviles en Barcelona: auriculares que alertan a epilépticos ante inminentes ataques, joyas que sirven para llamar a emergencias, medición de latidos, ayuda a personas con dificultades auditivas y hasta ropa inteligente que advierte mala postura al sentarse. Aunque el mundo muestra un uso creciente de estos dispositivos, los números de Colombia advierten que en términos de negocio todavía hay pendientes.
Durante 2018 se vendieron solo 1.400 dispositivos de este tipo en ese país, dijo Euromonitor y advirtió que solo consideró relojes y bandas inteligentes en su conteo. Aunque la muestra solo representa una parte del mercado, parece representativa: esos dos productos concentran más del 64 por ciento de las ventas mundiales. El gasto medio de colombianos en vestibles fue de 121.000 pesos (39 dólares), por lo que la cuenta da un total aproximado de 170 millones de pesos (unos 54.000 dólares), publicó el portal colombiano La República.
El volumen del mercado en Colombia ha crecido en los últimos años y las proyecciones siguen el mismo camino. En 2014 se habían vendido 800 dispositivos y en 2023 se comercializarán 1.900, casi 38 por ciento más que en el último registro. En dinero también las previsiones son buenas, pues se espera un incremento de 42,6 por ciento. A la fecha las tres empresas que están en el podio de wearables en Colombia son Apple, con una participación de 45 por ciento; Samsung, con 31,8 por ciento y Huawei, con 12,3 por ciento. LG sigue la lista que completan otros como Fossil y Michael Kors.
Si se repasan los datos del informe, no quedan dudas de que el mercado creció y los más optimistas seguramente hablen de que todavía queda margen para superar expectativas si se tiene en cuenta que Colombia tiene una población de 49 millones y eso se traduce en que solo una de cada 35.000 personas adquirió el año pasado un dispositivo de este tipo. Apple suma su contexto internacional para ser positivo: “El segmento de wearables aumentó de 50 por ciento por las sólidas ventas de Apple Watch y AirPods aunque ambos tuvieron restricciones de disponibilidad en algunos países”, dijo la empresa. Huawei también se mostró optimista al indicar que “trabaja en ser la marca líder en Colombia”.
A los buenos augurios de las firmas locales se suma los números en el plano mundial. El mercado de wearables alcanzó un récord de 59,3 millones de unidades comercializadas en el último trimestre, que completaron un total de 172,2 millones de unidades en el año, 27 por ciento más que en 2017. Se vendieron 55 por ciento más de relojes inteligentes trimestre contra trimestre y 66 por ciento más de dispositivos para los oídos, por tomar algunos ejemplos. Xiaomi y Fitbit son las únicas marcas que figuran en este registro y no en el de Euromonitor para Colombia.
Todos los argumentos anteriores presentan una debilidad: la cantidad de dispositivos vendidos es, a todas luces, muy baja. Ya se vio reflejado en el número de dispositivos por población y también queda expuesto si se contempla que la misma consultora estimó 11 millones de smartphones vendidos en el país en 2018. Esto quiere decir que se vendió un vestible por cada 7.853 teléfonos inteligentes. Estas cifras fueron presentadas por Canal 1.
En este contexto, los wearables parecen no tener techo y habrá tantos tipos de dispositivos como la imaginación de los fabricantes permita. Su uso se expande de la mano de empresas del sector y otras no tecnológicas, como algunas de moda, que también vieron en este tipo de dispositivos una oportunidad. Sin embargo, en términos de negocio todavía quedan planillas por llenar, pues las líneas de crecimiento aún no se traducen directamente en números comparables con teléfonos o computadoras. Vale hablar de perspectivas positivas siempre que se identifiquen a la par de los desafíos. Para superarlos, habrá que ser tan o más inteligentes que los dispositivos en cuestión.
