El 2019 de Axtel comenzó con foco distinto respecto del año anterior, que se vio signado por su salida del negocio masivo. Las noticias del primer trimestre no son auspiciosas si se contempla que arrojó pérdida por 77 millones de pesos (cuatro millones de dólares) frente a las ganancias por 1.242 millones de pesos (65,7 millones de dólares) informadas un año atrás.
El flujo de la operación se contrajo tres por ciento interanual hasta 1.074 millones de pesos (56,8 millones de dólares), con un margen de 34,1 por ciento. “Este ítem sin el beneficio de la venta de torres registrado en el primer trimestre anterior se hubiera incrementado un 10 por ciento”, dijo la compañía en un comunicado.
En febrero la asamblea de Axtel aprobó un fondo de recompra de acciones de hasta 150 millones de pesos (7,9 millones de dólares) que “será usado para mejorar la liquidez de las acciones”, añadió. Las inversiones en el primer trimestre se ubicaron en 377 millones de pesos (19,9 millones de dólares) mientras que su deuda neta cayó 17 por ciento anual hasta 15.406 millones de pesos (815,2 millones de dólares).
Fuera de los números, la firma señaló que se encuentra en proceso de separar sus operaciones en dos unidades de negocio: una proveedora de servicios de valor agregado que continuará suministrando soluciones de TI y Telecom a empresas y gobierno. La otra basada en infraestructura, para dar conectividad básica e Internet a clientes mayoristas y operadores en México.
Los ingresos de Axtel crecieron tres por ciento hasta 3.147 millones de pesos (166,5 millones de dólares) como producto de un aumento de cuatro por ciento en el segmento empresarial. Este ítem es responsable del 83 por ciento de la facturación de la compañía, quedando el 17 por ciento restante para el ítem de gobierno, que cayó dos por ciento anual.
