Brasil inicia el año con la licitación como objetivo pero con cronograma aún incierto

La licitación de espectro compatible con 5G en Brasil es, sin dudas, uno de los objetivos centrales de los marcados para el corto plazo por la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel). Una incertidumbre compartida con el resto de países de la región sobre la forma más conveniente de adjudicar porciones y cuestiones propias del mercado local funcionan en contra de la certidumbre en cuanto a la fecha en que finalmente se ejecutará el proceso. Sin cronograma definido, danzan propuestas y se agendan reuniones para tratar el tema.

La puja iba a darse en 2018, luego se pospuso para la primera mitad de 2019 y más tarde para el último semestre de ese año. Cuando transitaba el tercer trimestre se propuso que sea en marzo de 2020 y ahora ya se habla oficialmente de la primera mitad de 2020 como fecha límite, aunque los puntos que todavía quedan por resolver podrían aplazar la discusión hasta el año próximo. De hecho, la mayoría de las empresas de Brasil mostró flexibilidad respecto de la fecha, haciendo foco en que deben atenderse todos los ítems pendientes para que resulte un éxito.

Las autoridades del regulador brasileño tendrán reunión extraordinaria el próximo 22 de enero y es posible que uno de los temas a tratar sea este, dijo el presidente de la entidad Leonardo Euler. En diálogo con el portal local Teletime agregó que los tiempos no solo dependen de Anatel sino que también hay otras instancias involucradas, como el Tribunal de Cuentas de la Unión. Sobre la posibilidad de entrantes, señaló que las licitaciones “siempre están abiertas para cualquier interesado” al tiempo que negó que la situación de Oi, que evalúa vender su operación, pueda condicionar de alguna forma el proceso.

Mientras tanto, al cierre del año pasado se conoció la propuesta del consejero del regulador Emmanuel Campelo, que establece inversiones por bloque con precio de reserva más compromisos de cobertura, una idea que gana peso en la región y que ya fue implementada en la subasta que tuvo lugar en Colombia el 20 de diciembre. En ese caso la oferta de los interesados para la banda de 700 MHz surgía de un combo entre dinero y localidades a conectar, una idea similar a la que pensó Campelo para la de Brasil, que incluiría como mínimo un remanente en 700 MHz, más porciones hasta 100 MHz en 2,3 GHz y 200 MHz en 3,5 GHz.

La propuesta de Campelo es que en la banda de 700 MHz, por ejemplo, se sume a dinero el objetivo de atender hasta el 40 por ciento de las ciudades que todavía no cuentan con cobertura 4G para 2022 y llegar a la totalidad para 2024, con obligaciones adicionales.  En 2,3 GHz, en tanto, se agregará el compromiso de llevar 4G a ciudades con menos de 30.000 habitantes hasta completar el 100 por ciento alcanzado para 2024 y para 3,5 GHz se suma, entre otros puntos, la responsabilidad de los ganadores de hacerse cargo de cualquier interferencia que surja, señaló TeleSintese.

Este documento también incluye lotes de frecuencias entre los 24,3 y 27,5 GHz, pero en ese caso no se esperan compromisos adicionales. Se tome o no la propuesta, Brasil sigue mostrando al resto que tiene aspectos por resolver antes de poder oficializar el cronograma de la licitación de espectro compatible con 5G. Coexistencia de servicios en algunas bandas y redefiniciones sobre el número de operadores que serán parte del proceso permanecen en el listado de dudas en un país que, según distintos estudios, será junto a México el mayor responsable del desarrollo 5G en la región.

Nicolás Larocca es Técnico Superior en Periodismo (TEA) y Locutor Integral (ISER). Durante su carrera profesional se desempeñó en diferentes medios radiales, digitales y en gráfica como productor de contenidos, redactor y analista. Tiene conocimientos en comunicación interna, deportes, bancos y seguros, y desde 2013 se especializa en el mercado de las telecomunicaciones a escala regional.

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