La Comisión Internacional sobre Protección de Radiaciones no Ionizantes (ICNIRP, por sus siglas en inglés) publicó esta semana una nueva guía para la protección de seres humano expuestos a campos electromagnéticos de radiofrecuencia —mayores a 6 GHz—. La guía cubre las nuevas redes 5G —cuyo impacto en la salud pública había sido cuestionado por algunas asociaciones preocupadas por estos temas—, radio AM y DAB, Wi-Fi, Bluetoothy los celulares 3G/4G. La decisión, que llevó un proceso de siete años, es más efectiva que la existente en cuanto al uso de 5G en bandas de alta frecuencia. “Las guias proveen protección por sobre cualquier efecto adverso en la salud en relación con la exposición en el rango de 100 kHz a 300 GHz”, indicó un comunicado.
La asociación se ocupó de indicar que la nueva generación móvil no hará daño a la población porque existen estas guías que las empresas deberán cumplir. Además, apuntó que se modificaron las reglas para mejorar la transparencia y hacer visibles las bases científicas y lógicas de las decisiones. Además, se crearon mejores especificaciones de cómo acceder a escenarios de exposición complicados.
Específicamente en términos de redes 5G, la ICNIRP indica que se espera que la tecnología genere exposiciones similares a la de redes anteriores como 4G. Sin embargo, ICNIRP “ha realizado una cantidad de cambios para no confiar en esas predicciones y asegurarse que 5G no provocará ningún daño”. Esto incluye restricciones a la exposición promedio en frecuencias mayores a 6 GHz para todo el cuerpo y restricciones de corto tiempo (menores a seis minutos) para frecuencias por encima de los 400 MHz. Asimismo se reduce el promedio de área por frecuencia mayor a 6 GHz (lo que reduce la máxima exposición de una persona).