La telefonía móvil en Latinoamérica seguirá creciendo hasta 2025 para alcanzares cuatros de toda la población. Para ese año la 2G se estima que sólo tenga una participación del seis por ciento, mientras que la 3G tendrá un 22 por ciento del total.
La 4G será la tecnología dominante con el 64 por ciento y la 5G ya habrá capturado el ocho por ciento si se cumplen las previsiones. La aportación de la telefonía a los PIBs nacionales seguirá en aumento a medida que el ecosistema se expande y será una importante fuente de generación de nuevos empleos, además de cerrar la brecha digital.
Un aspecto a tener muy en cuenta será el de la inteligencia artificial y su rol para generar riqueza en los diferentes mercados de la región y los operadores ya están iniciado la implementación de esta inteligencia en algunos de sus procesos clave.