Durante el 2012, las autoridades chilenas confían en eliminar completamente la larga distancia nacional, medida que por el momento sólo alcanza algunas regiones del país.
Según La Nación, los cargos por llamadas que se efectúan entre las zonas primarias de telefonía local generan ingresos por 40 millones de dólares.
“La tecnología cambió y no existe ninguna razón técnica o económica en la actualidad, para que los usuarios sigan pagando un costo adicional por llamar entre ciudades. Con esta Ley estamos iniciando un proceso gradual para que las llamadas dentro de Chile cuesten lo mismo que una llamada local, lo que traerá un alivio a los bolsillos de todos los chilenos, especialmente a las familias más humildes”, afirmó el ministro de Transporte y Telecomunicaciones, luego de que el Congreso aprobara la nueva Ley en noviembre de 2010.
Por otro lado, el país seguirá con una agenda cargada en materia de telecomunicaciones, en donde se destaca el impulso de la Televisión Digital Terrestre (TDT), la implementación de la Ley de Antenas y el desafío de llevar la penetración de la banda ancha hasta una penetración del 70 por ciento.